La carta de presentación de la mayoría de los 16 diputados locales con licencia, que aspiran a reelegirse o hacerse de una presidencia municipal, es la improductividad legislativa y el apoyo a las comunas con el “Fondo de Resarcimiento a las Finanzas Municipales”, también llamado “moches”.
Son cinco del Partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), tres del Partido del Trabajo (PT), dos de la Revolución Democrática (PRD), dos de Acción Nacional (PAN), así como uno de Encuentro Social Tlaxcala (PEST), uno más del Verde Ecologista de México (PVEM), otro de Movimiento Ciudadano (MC) y uno del Revolucionario Institucional (PRI).
Cuando integraron la LXIII Legislatura local llegaron con la promesa de cambiar las cosas, pues la mayoría de legisladores venía de la coalición nacional que enarboló la llamada Cuarta Transformación, así que las expectativas fueron altas, pero los resultados han sido exiguos.
Por ejemplo, Patricia Jaramillo García, quien se hizo de la curul mediante las siglas de Morena por la vía plurinominal, ahora hace campaña para lograr la diputación federal por el Distrito II abanderando al Partido Redes Sociales Progresistas. Su paso por la legislatura fue más que gris, pues presentó un mínimo de iniciativas que no fueron aprobadas o de poco impacto para Tlaxcala, es el caso de la creación del Festival Cultural Malintzin y la ley para regular las unidades distribuidoras de agua.
Miguel Piedras Díaz también llegó como plurinominal al legislativo por Morena y a la fecha se candidatea como aspirante a alcalde de Apizaco bajo las siglas del PEST. Su quehacer legislativo fue de lo más improductivo. Es más, para su beneficio personal, el también concesionario del transporte público propuso reducir en un 90 % los costos causados para la transmisión de concesiones de transporte e intentó trabajar en la Ley de Movilidad.
En tanto que Mayra Vázquez Velázquez, también diputada con licencia de Morena, se vio inmiscuida en escándalos de corrupción, pues el presidente de Tecopilco, Olaf Jonathan Vázquez Morales, la acusó de condicionar los apoyos del fondo oficial pendiendo “moches”, acción que derivó en un pleito en los tribunales. Fue dos veces presidenta de la Mesa Directiva, esta última ocasión por unas cuantas semanas, pues después de su nombramiento se separó del cargo, mientras que en el trabajo legislativo solo organizó foros turísticos y ahora quiere ser alcaldesa de Xaltocan.
A su vez, Jesús Rolando Pérez Saavedra, al menos no ha traicionado al partido Morena, pues busca la alcaldía de Ixtacuixtla cobijado por las mismas siglas, pero el problema es que dejó sin representación a ese Distrito local, toda vez que su suplente Edgar Carro Roldán, también compite en busca de la alcaldía de Panotla.
Víctor Manuel Báez López continúa en Morena y pretende la presidencia de Zacatelco, fue coordinador de la bancada y no tuvo capacidad para mediar acuerdos. Al final le costó su remoción como coordinador y se vio enfrascado en varios pleitos con sus similares, los cuales sostuvo desde la máxima tribuna de Tlaxcala.
Sus propuestas para nombrar, ratificar y remover a los magistrados del TSJE y del Tribunal de Justicia Administrativa, y aquella para seleccionar a un fiscal general, quedaron “congeladas”, mientras que su intento por crear la Fiscalía General del Estado quedó solo en una buena intención.
En la bancada del PT, quien sigue siendo leal a los colores es María Félix Pluma Flores, pues su candidatura a la alcaldía de Tlaltelulco es por el "partido de la estrella" que hoy gobierna su padre, pero su quehacer legislativo no es su carta fuerte, a pesar que al inicio de la legislatura se comprometió a no ser una diputada “levanta dedos”.
Organizó los parlamentos juveniles y, en leyes, planteó implementar una red inalámbrica de internet gratuito en el estado; campañas obligatorias de prevención contra el cáncer y candidaturas a jóvenes, entre otros, pero la mayoría sigue en su expediente parlamentario.
A su vez, Víctor Castro López, aspira a repetir como alcalde de Tzompantepec, vistiendo las siglas de Morena, y en el legislativo era petista, estuvo involucrado en muchos pleitos y declaraciones polémicas, pero fue de los más improductivos de la legislatura, pues aunque logró la creación de Ley para la Atención Integral de Enfermedad Renal Crónica, no se ha aplicado por falta de presupuesto.
Sus desatinadas declaraciones desde la máxima tribuna del estado eran constantes y le sirvieron para confrontarse con médicos y enfermeras de la Secretaría de Salud, así como con mujeres trabajadoras de la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
En tanto que Irma Yordana Garay Loredo, llegó a la presente legislatura por la vía plurinominal; sigue vistiendo las siglas del PT para buscar la diputación federal en el Distrito II, pero no por lealtad, sino porque ese partido lo controla desde hace años su padre, Silvano Garay Ulloa. Logró hacerse de la Junta de Coordinación y Concertación Política del Congreso del estado, pero casi de manera inmediata fue removida, amén de que su trabajo legislativo fue imperceptible e irrelevante.
Laura Yamili Flores Lozano, sigue siendo perredista, busca la silla presidencial de Benito Juárez, pues pretende “cobrar” los apoyos que envió a esa comuna, con recursos del fondo para los municipios. Tuvo aciertos como la aprobación de la Ley Olimpia, pero también muchas de sus propuestas quedaron solo en la presentación en tribuna y duermen “el sueño de los justos”.
Miguel Ángel Covarrubias Cervantes es un auténtico “chapulín” de la política, pues ha estado en varios partidos desde que inició su carrera en el Legislativo; se acomodó en la bancada del PRD y ahora quiere reelegirse como diputado del mismo distrito local 14, pero por el PT y ambiciona cobrar en votos, la entrega de calentadores solares y animales corrientes de granja.
Cuando llegó a la legislatura, lo hizo con ímpetu, prometió derribar los muros “de la ignominia” y ahí siguen, empeñó su palabra para la despenalización de la marihuana y no lo logró, su "ley popote" fue vetada y no pudo obligar a una empresa refresquera a pagar un impuesto anual de 12 millones de pesos, como pretendía.
“CHIQUILLADA” PLURINOMINAL PIDE VOTO
El legislador plurinominal del PAN, Omar Milton López Avendaño, se caracterizó por ser una oposición constante en el Congreso de Tlaxcala, la mayoría de sus votaciones fue en contra de Morena y aliados, hoy busca repetir en el cargo, con promesas que debió concretar cuando estuvo sentado en la curul. Su compañera de bancada, Leticia Hernández Pérez, también del PAN y de representación proporcional, ahora quiere ser alcaldesa de su natal Santa Cruz Tlaxcala y espera que sus apoyos en obras, como el puente de La Trinidad, le reditúen dividendos electorales, pues no hubo trabajo efectivo en materia legislativa.
Otro aspirante a reelegirse, es José Luis Garrido Cruz, quien solicita el voto de la ciudadanía para que ocupe nuevamente la curul, pero ahora por mayoría relativa y ya no por la vía plurinominal, como lo hizo en esta legislatura. Dejó pendientes importantes, como las soluciones de límites territoriales, en varios municipios de la entidad.
- 16 diputados con licencia están en campaña para obtener algun puesto de elección popular.
EL APUNTE
- Son cinco de Morena, tres del PT, dos del PRD, dos del PAN, así como uno del PEST, uno más del PVEM, otro de MC y uno PRI.
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