Frutas, verduras, cáscaras, estiércol, café molido, bolsas de té y otros residuos orgánicos fueron empleados en la elaboración de composta que ayudará a nutrir los suelos y plantas, técnica que compartieron investigadoras del Centro de Investigación en Biotecnología Aplicada (CIBA) del Instituto Politécnico Nacional en conjunto con la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UATx).
La sede fue la presidencia de comunidad de La Trinidad Tenexyecac, en Ixtacuixtla, donde Myrna Solís Oba, investigadora del CIBA-IPN, explicó de manera teórica y práctica, el proceso para “nutrir” la tierra y evitar su extracción en los bosques.
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La actividad fue realizada para acercar a los pobladores las acciones que servirán para cuidar y preservar el medioambiente, pues han detectado severos daños, externó Mercedes Rodríguez Palma, investigadora del laboratorio de biodiversidad del Centro de Investigaciones en Ciencias Biológicas de la UATx.
Agregó que trabajan de manera conjunta con las comunidades, de ahí que acercan pláticas, talleres y cursos sobre biodiversidad, con la finalidad de que las actividades sean replicadas en los hogares y las escuelas primarias para educar a los infantes desde temprana edad, pues se vive una crisis dramática por el mal uso de los recursos, lo que repercute en todos los ámbitos, social, cultural y hasta político.
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EL TALLER
Unas 30 personas asistieron al curso “Elaboración de composta” para aprender las técnicas para dar uso a los desechos orgánicos que generan en los hogares.
La investigadora Solís Oba detalló que la elaboración de composta consiste en separar la materia orgánica, colocarla en el suelo o un contenedor con drenaje en la parte inferior, tapar con tierra, humedecer y remover semanalmente.
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Precisó que pueden ser empleados todos los residuos orgánicos, excepto huesos o piel de animales, pues tardan más tiempo en descomponerse.
“La composta estará lista en unos cuatro meses, podemos constatar con un cambio de apariencia en la tierra, adquirirá un tono negro, a mitad del proceso de elaboración la temperatura se elevará hasta 60 grados y morirán los microorganismos patógenos, sí nuestra composta tiene las condiciones necesarias de humedad y alimento llegarán solas las lombrices”.
Puntualizó que las lombrices no son dañinas para las plantas, pues se comen los residuos muertos. Además, la composta contiene ácidos húmicos que son un excelente fertilizante.
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DATO:
Alrededor de cuatro meses tardan en descomponerse los desechos orgánicos para obtener composta que servirá para nutrir plantas y suelos.
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