El obispo de Tlaxcala, Julio César Salcedo Aquino, exhorto a los católicos acatar las nuevas medidas anunciadas el pasado sábado, las cuales calificó de “dolorosas pero por el bien de la población”.
En la misa dominical transmitida en redes sociales desde la Santa Catedral de “Nuestra Señora de la Asunción”, insistió en que las medidas restrictivas obedecen al aumento alarmante de contagios y fallecimientos a causa del nuevo coronavirus.
“La iglesia tiene la obligación moral de cuidar a la gente, a las comunidades y a las personas adultas enfermas, así que hemos tomado estas decisiones, que aunque son dolorosas, resultan para bien de la comunidad”, destacó.
El encargado de leer el comunicado ante las cámaras, fue el párroco Manuel Zamora Díaz, púes la misa la celebraron a puerta cerrada, en donde recordó que las nuevas medidas, entrarán en vigor a partir de este lunes y concluirá hasta el dos de febrero.
“Las misas dominicales del 17, 24 y 31 de enero se celebrarán sin participación de fieles, a puerta cerrada y se transmitirán por las plataformas digitales de las parroquias y los templos estarán abiertos de lunes a sábado”, precisó.
El presbítero añadió que las misas se seguirán de manera escrupulosa todas las medidas de salud indicadas en el protocolo ya publicado, mientras que las misas de bodas, 15 y tres años, confirmaciones, primeras comuniones y bautizos se suspenderán y reprogramarán.
Cabe señalar que la diócesis también ordenó que las fiestas patronales o de alguna devoción, -sobre todo la del dos de febrero-, que se lleven a cabo a puerta cerrada sin participación de fieles y se transmitirán por las plataformas digitales de las parroquias.
Otras medidas son: Se suspenderán las serenatas, mañanitas y demás actividades de piedad popular. Además, la atención de enfermos y celebraciones de difuntos la feligresía debe seguir las medidas ya indicadas y de extremo cuidado. También no asistir a vigilias de difuntos en casas particulares, para evitar congregación de fieles y por lo mismo, nuevos contagios.
La iglesia tiene la obligación moral de cuidar a la gente, a las comunidades y a las personas adultas enfermas, así que hemos tomado estas decisiones, que aunque son dolorosas, resultan para bien de la comunidad
Julio César Salcedo / Obispo de Tlaxcala
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