Del 30 de junio al 30 de octubre de 2024 Tlaxcala recuperó 357 hectáreas de espejo de agua superficial captada por lluvias en embalses, bordos y jagüeyes, reveló la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Al concluir la temporada de lluvias y dar paso al periodo de fríos, reportó que Tlaxcala dispone de mil 303 hectáreas de agua en 16 presas monitoreadas por la dependencia del gobierno de la República.
De estos receptores, ocho de ellos -entre los que se encuentran la presa Mariano Matamoros en Ixtacuixtla- llevan 30 días que son desfogadas para evitar un riesgo entre la población.
Del total de agua almacenada en el territorio estatal, el embalse de San José Atlanga es el más grande de Tlaxcala pues, aunque enfrenta estrés hídrico, tiene un 58 % de llenado con un total de 814 hectáreas inundadas. De junio a octubre recuperó 195 hectáreas inundadas.
En la comparación estadística se tiene que, para junio de 2023, el embalse más importante de la región contaba con 842 hectáreas cubiertas.
De esta forma, las cuatro presas situadas entre Hueyotlipan y Panotla que estuvieron secas durante cinco años, con las fuertes precipitaciones alcanzaron sus niveles.
Las presas Recova, San Fernando, el Sol y la Luna, también tienen vida acuática.
La Conagua reveló que la presa Mariano Matamoros que se encuentra en San Felipe Ixtacuixtla, continúa drenando tras la lluvia registrada el 28 de septiembre y que causó inundaciones a hogares en la comunidad de San Diego Xocoyucan.
En el último reporte de la Conagua del 31 de octubre de 2024, el embalse que fue construido en 1987 acumuló cinco millones de metros cúbicos de agua pluvial.
Asimismo, la presa El Muerto ubicada en Tlaxco y que en 2002 se secó totalmente, llegó al 50 %, mientras que la Lázaro Cárdenas volvió a dar esperanzas a los hombres del campo que utilizarán el recurso hídrico en la producción de hortalizas como cilantro, brócoli y betabel.
La presa Las Cunetas, que se encuentra en linderos de Tetla de la Solidaridad, no fue alimentada este año, apenas llegó al 30 % por lo que la Conagua estimó que podrían desaparecer al concluir el estiaje en 2025.
El Sol de Tlaxcala constató que la presa Apizaquito, aunque está azolvada, tiene llenado completo, es un lugar de esparcimiento y pesca deportiva.
Los cuerpos de agua “El Saltillo” y “El Corazón”, situados en el municipio de Emiliano Zapata también se recuperaron.
DOS LAGUNAS SE RECUPERAN
La laguna Totolcingo o Tequexquital, situada en El Carmen Tequexquitla, almacenó un 30 % de agua que no será suficiente para la anidación del pato canadiense.
Ambientalistas de la capital tlaxcalteca estimaron que derivado de trabajos de azolve y construcción de colectores alimentadores se logró que el embalse alcanzara un 60 %.
Desde hace dos semanas nuevamente se convirtió en la anidación de miles de aves de diferentes especies que pasan desde el otoño una estancia de cuatro meses.
EXHORTA SIA A CUIDAR EL AGUA
Rafael de la Peña Bernal, titular de la Secretaría de Impulso Agropecuario (SIA), exhortó a los productores acuícolas, agrícolas y ganaderos a cuidar el agua superficial frente al estiaje que se aproxima para 2025.
Mencionó que el temporal de lluvias ha permitido que los cuerpos de agua se recarguen, lo que permite una disponibilidad suficiente para trabajar al inicio del ciclo primavera-verano 2025 en jagüeyes, presas y bordos.
Dijo que el gobierno de Lorena Cuéllar Cisneros invirtió en tres años para la construcción y equipamiento de más de 550 jagüeyes que ya tienen diferentes niveles de almacenamiento y uso agrícola y acuícola en las zonas norte, poniente y oriente de Tlaxcala.
Aclaró que ha sido uno de los mejores temporales de precipitación pluvial después de tres años de sequía atípica.
Comentó que la SIA promueve la siembra de semillas de carpa y tilapias para la reproducción en embalses y estanques donde interviene la mano del hombre al controlar temperaturas en la reproducción y engorda de estas especies pesqueras.
Asimismo, destacó que para este ciclo otoño-invierno 2024-2025 y el primavera-verano 2025 existen condiciones para potenciar la acuacultura en la producción de carne de carpa, tilapia y trucha, asimismo, la producción de hortalizas y otras semillas nativas de maíz.
Hay suficiente agua para impulsar los proyectos de los tres niveles de gobierno, solo falta cuidar el recurso no renovable que está disponible en más de mil 400 hectáreas de espejo de gua en embalses y jagüeyes”, puntualizó.