Durante más de 15 días viajó, -primero en camión y después en tren por Tenosique, Tabasco- hasta llegar a Apizaco, Tlaxcala.
El migrante de 25 años tenía como meta quedarse en México, “pues mi idea no era ir para Estados Unidos, sino en un lugar bonito de este país”.
Y agregó que “siempre he vivido solo, me criaron unas tías, porque mi madre nos abandonó cuando éramos niños y de mi padre no tenemos noticias… así que, decidí salir adelante en México pues en Honduras hay pobreza y terror”, explicó a este Diario.
Contó que en Orizaba, Veracruz, descendió para tomar alimentos y después continuar el viaje.
“Como dijeron que en Apizaco hay violencia nos seguimos derecho, pero más adelante la policía estatal nos disparó”, denunció durante la charla en el albergue.
Por ello, mencionó que el pasado viernes solicitó a la Comisión Estatal de Derechos Humanos, su intervención para solicitar que ante el ataque que sufrió, el gobierno mexicano le expida una visa humanitaria para quedarse en este país.
- Un salvadoreño y dos hondureños solicitan la visa humanitaria ante el Instituto Nacional de Migración