Este día, en el Hospital Regional de Tzompantepec "Emilio Sánchez Piedras", perteneciente al modelo IMSS-Bienestar, fue inaugurada la Sala de Espera para familiares que aguardan por información de sus pacientes.
En la entrada principal del nosocomio quedó instalado el espacio que dará refugio y protegerá de las inclemencias del tiempo a las personas que antes debían esperar en las inmediaciones del inmueble, en la intemperie.
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Tras cortar el listón inaugural, la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros indicó que ese espacio aminorará la espera de las personas que de por sí ya tienen la preocupación de un familiar hospitalizado.
Pero si aparte de eso quizá no traemos un recurso para poder estar en un lugar seguro, poder ir a comer algún lugar y resguardarse del sol, de la lluvia o del frío en esta época que es la más cruda del año; por eso para mí es importante que nuestros hospitales tengan un espacio para los familiares, donde tengan un resguardo y puedan estar un poco más cómodos, expresó.
Ahí, recordó que el gobierno estatal también construirá un albergue para familiares en la zona de hospitales, en Apetatitlán, otro proyecto de suma importancia para quienes esperan noticias o tienen que cuidar de algún paciente.
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Acompañada, entre otras personas, de Gabriel Gutiérrez, responsable del IMSS-Bienestar en Tlaxcala, agradeció la labor de médicos, enfermeras y personal administrativo de ese hospital que atiende el 50 % de pacientes que hay en el sector salud de Tlaxcala, y que pese a lo difícil hacen su labor con amor.
Yo seguiré trabajando desde donde estoy para darles siempre mejores condiciones como trabajadores, y también a nuestros pacientes, aseveró.
Por su lado, Luis Felipe Hernández Galicia, director del Hospital "Emilio Sánchez Piedras", informó que de enero a noviembre de este año en el servicio de Emergencias fueron atendidos 13 mil 71 pacientes, fueron hospitalizados 6 mil 131 pacientes y han sido dados de alta 6 mil 612 pacientes, lo que significa que 6 mil 612 hijos, esposos, padres, abuelos o hermanos se han integrado nuevamente con sus familias, y todo eso por el apoyo del equipo multidisciplinario de salud que integra al Hospital de Tzompantepec.
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Indicó que cuando una persona pierde la salud y por la gravedad de su enfermedad tiene que ser hospitalizada, en el núcleo familiar se pierde un integrante y eso genera dolor, tristeza, preocupación y duelo, que pueden convertirse en un proceso doloroso y hasta inhumano cuando la espera de la información e indicaciones médicas es afuera del hospital, padeciendo las inclemencias del tiempo.
Por ello, destacó la importancia de la construcción de esa sala de espera, un espacio digno para los familiares, para que su espera sea lo más humana posible.
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