Con la representación del pasaje bíblico de Domingo de Ramos, el obispo de Tlaxcala, Julio César Salcedo Aquino, inicio la celebración de la Semana Santa, días que pidió a la feligresía vivir con misericordia.
Posterior a la bendición de palmas en el atrio de la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, el obispo llevo a cabo la eucaristía de Domingo de Ramos que hace remembranza de la entrada de Jesús Cristo a Jerusalén y con lo que da inicio oficial la Semana Santa.
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Durante el sexto domingo de la cuaresma, el máximo jerarca de la Iglesia católica en Tlaxcala convocó a que estas fechas sean de reflexión de las condiciones que se viven en la actualidad.
Planteó que estas fechas dan certeza de la presencia de Dios en diversos aspectos de la vida, que impulsan al crecimiento humano, espiritual y apostólico para hacer vida el proyecto de Jesús de Nazaret.
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Somos misioneros porque queremos ofrecer al mundo este proyecto de vida con nuestro servicio, por eso es el centro de nuestra fe esta Semana Santa, apuntó el obispo.
Refirió que la denominación de Días Santos porque se manifiesta de una forma clara la misericordia de Dios, que dejan en libertad a cada individuo de aceptar o rechazar el amor ofrecido por el Mesías.
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Concluyó que por eso la Semana Santa se vuelve un llamado a la Misericordia, a no alejarse de Dios, a reconocer los pecados y buscar la humildad.