El Mercado Alternativo de Tlaxcala, que desde hace más de 14 años se ubica en el parque San Nicolás de la capital, llegó a la Secretaría de Cultura federal.
A petición de Alejandra Frausto Guerrero, la titular de esa dependencia, desde hace dos semanas alrededor de 20 productores pertenecientes al mercadito de San Nicolás, se instalan en la plaza principal del Palacio de Cultura, para ofrecer una amplia variedad de alimentos agroecológicos.
Alicia Sarmiento Sánchez, una productora de maíz, frijol y trigo, indicó que la secretaria les hizo la invitación y les ofreció un espacio para vender sus productos, toda vez que se ha interesado en la relación que existe en la comida y la cultura.
Abundó que, a decir de Frausto Guerrero, también buscan fomentar la comida tradicional o cultural, como una forma de combatir los malos hábitos alimenticios que generan enfermedades como obesidad o desnutrición, eso además de que quieren rescatar las enseñanzas ancestrales en cuanto a la comida.
La intención es que por lo menos una vez a la semana podamos ofrecer a los consumidores comida sana, nutritiva y de buena calidad, porque está producida sin agroquímicos, dijo.
Explicó que desde la inauguración se instalan todos los miércoles en la Secretaría de Cultura en un horario de 08:00 a 14:00 horas, mientras que en parque de San Nicolás están en sus horarios habituales: los viernes y lunes de 08:00 a 14:00 horas.
LOS ALIMENTOS
En el patio de la Secretaría de Cultura las personas podrán disfrutar de todos los derivados del maíz como quesadillas, sopes, tlacoyos, así como variedades de carne criada en casa como pollo y conejo.
También hay alimentos para personas vegetarianas o veganas como milanesas o mixiotes hechas de trigo y de otros vegetales que pueden encontrarse con don Elías Vázquez García, productor de Xaloztoc.
Y entre otras cosas, en el puesto de don Jaime Gaspar García Hernández podrán comer tacos de escamol, gusano de penca de maguey o cuaresmeño, chinicuil, hormiga chicatana y xahue, insectos que ellos mismos obtienen y otros que adquieren con un intercambio con productores de Chapingo.
A todo eso se suman las bebidas como el pulque, medicina natural, panes, tamales, harinas, atole, frutas y verduras de temporada, y algunas semillas.
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