Mantienen viva fe en Virgen de la Caridad en Huamantla

Torrencial aguacero aleja a la gente en lo que sería La Noche que Nadie Duerme

Tomás Baños | El Sol de Tlaxcala

  · sábado 15 de agosto de 2020

Foto: Moisés Morales

La pandemia por la enfermedad viral, la lluvia y los relámpagos, no impidieron la celebración a la Virgen de la Caridad en Huamantla.

Esta vez los cohetones fueron remplazados por truenos, no hubo tapetes en las calles, la Noche que Nadie Duerme será para otra edición.

Como cada 14 de agosto, la lluvia no podía faltar, el cielo oscureció antes de lo habitual en días veraniegos. Calles inundadas a causa de los remanentes de la onda tropical proveniente del Océano Atlántico.

Sin embargo, para celebrar 143 años a la Santísima Virgen, el fervor, la fe y la caridad se sintieron en cada hogar.

Eso sí, niños, mujeres y hombres cubiertos con cubrebocas y caretas para evitar contagios por el nuevo coronavirus, aunque hubo jóvenes temerarios.

Foto: Moisés Morales

Algunos comercios de alimentos abrieron para ganarse lo del día; desde sus hogares vivieron una noche diferente.

Doña Margarita, una vendedora de elotes hervidos, se apostó bajo el agua para comenzar sus ventas. “Esperamos que la virgencita nos mande su bendición para que ya no llueva y me permita llevar el sustento a mis hijos”, expresó.

Un vendedor de camotes al vapor llamaba la atención entre las calles inundadas.

Puntual a las 19:00 horas, Julio César Salcedo Aquino, Obispo de Tlaxcala, comenzó la homilía previo al festejo de la medianoche.

Los faroles de las calles fueron encendidos y la gente comenzó a reunirse frente al templo católico entre el chipi chipi.

Elementos de la Comisaría de Seguridad Pública de Huamantla impidieron que la gente ingresara al templo, el acceso estuvo cerrado hasta después de las 20:00 horas.

A las 19:15 horas fue encendida la Arcada Luminosa de la Caridad, más de 25 mil luces tipo LED alumbraron la calle principal Benito Juárez.

Elementos de la Comisaría de Seguridad Pública de Huamantla impidieron que la gente ingresara al templo, el acceso estuvo cerrado hasta después de las 20:00 horas.


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