La inesperada muerte del sacerdote Guillermo Aguilar, adscrito a la parroquia de San Francisco, municipio de Tepeyanco causó conmoción entre la comunidad católica la mañana de este domingo cuatro de febrero.
El párroco fue localizado desvanecido en el baño de la sacristía inconsiente y que no respondió a los diversos llamados que le hizo personal de la parroquia, por lo que llamaron al Servicio de Emergencias 911 para reportar el hecho.
Paramédicos de la Cruz Roja arribaron al lugar para dar atención prehospitalaria al sacerdote Guillermo Aguilar; sin embargo, informaron que ya no contaba con signos vitales y solicitaron la presencia del Servicio Médico Forense (Semefo) para hacer el levantamiento del cuerpo.
Al lugar llegó el obispo de Tlaxcala, Julio César Salcedo Aquino, para dar la bendición a los restos mortales del padre y para que posteriormente personal del Semefo llevará a cabo el levantamiento del cuerpo y practicará la necropsia de ley.
Se presume que Guillermo Aguilar falleció de causas naturales, pero será la necropsia la que arroje la causa de muerte del representante de la iglesia católica, que causó consternación entre la feligresía.