Con las manos en la masa agarraron a 282 niños de la escuela primaria bilingüe indígena Xochitekali del municipio de Contla de Juan Cuamatzi, no por travesura o mal comportamiento, sino por elaborar el tradicional pan de muerto en el horno de su institución.
Y es que para fortalecer las tradiciones culturales de los infantes, docentes y padres de familia apoyaron a los alumnos en la producción de más de tres mil piezas de hojaldras.
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Ahí, en el salón de usos múltiples comenzaron las técnicas de amasado, donde los seis grados de estudios entraron a trabajar en diferentes turnos y días, para la elaboración artesanal del pan.
Asimismo, los 12 docentes de la institución cambiaron por unas horas el pintarrón y borrador por las charolas panaderas para instruir a sus alumnos en una de las costumbres más arraigadas en esa jurisdicción.
Según la historia, el pan de muerto tiene su origen en la época de la conquista, cuando los españoles, espantados por los sacrificios humanos en ceremonias religiosas por la población indígena, elaboraron un pan de trigo bañado en azúcar pintada de rojo que simboliza un corazón y la sangre del sacrificado.
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De este modo, ahora las nuevas generaciones comenzaron a elaborar el pan de muerto que servirá de ofrenda para los altares de sus fieles difuntos.
Fue desde hace seis años que comenzó la tradición de elaborar la hojaldra en la institución educativa, cuando padres de familia edificaron un horno en la parte trasera de la escuela, explicó el director de la primaria Xochitekali, Vicente Filiberto Pérez Capilla.
La idea, dijo, es enriquecer las tradiciones mexicanas entre el alumnado “para fortalecer nuestras raíces”, también informó el directivo que como educación indígena tenemos que trabajar por preservar nuestra cultura, no solamente la lengua indígena, como el náhuatl, sino todo lo referente a nuestras tradiciones
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Por su parte, el presidente de padres de familia de la institución, Rogelio Acoltzi Bautista, refrendó su compromiso de apoyo a los docentes, en “todos los trabajos que conlleven al mejoramiento educativo de la matrícula de la escuela, porque eso es parte de la educación de nuestros hijos”.
Mientras que Josué Ayometzi Acoltzi, presidente de participación social de la primaria bilingüe, expuso que los parterfamilias buscan fomentar, además de las tradiciones culturales, la sana convivencia con este tipo de actividades.
Tratamos de sembrar ese legado de nuestros antepasados, pero además de enseñarlo, lo ponemos en práctica para que los niños conozcan paso a paso la elaboración del pan de muerto u hojaldra como se le conoce
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Y es que el nombre de hojaldra comenzó a ser utilizado por el hojaldre que se utiliza como ingrediente del pan de muerto, con el tiempo la palabra tomó tradición.
Un atole acompañó la prueba de pan de muerto elaborado por alumnos de primaria de la escuela Xochitekali, las demás piezas serán utilizadas como ofrenda para los fieles difuntos.