LUIS MUNIVE Y ESCOBAR, PIEZA FUNDAMENTAL DE ESTEPROPÓSITO
Alista Iglesia un festival culturalque contempla la transmisión de la misa a celebrarse el próximo15 de octubre en la Plaza de San Pedro del Vaticano, en Roma,Italia Al ser Chiautempan uno de los municipiostlaxcaltecas donde el fervor católico se vive con profundosentimiento, feligreses y autoridades religiosas alistan unfestival cultural que contempla la transmisión en vivo de lacelebración eucarística en la que el papa Francisco canonizará alos Niños Mártires, Cristóbal, Antonio y Juan, desde la Plaza deSan Pedro del Vaticano, en Roma, Italia.
El párroco Pablo Cuatecontzi destacó la relevancia de que losNiños Mártires no solo sean declarados como los nuevos santosmexicanos, sino como patronos de la infancia y la juventud deAmérica, al ser considerados los primeros mártires convertidos alcristianismo, tras ser evangelizados por los frailes franciscanos ydominicos.
El programa iniciará desde la noche del 14 de octubre, conoraciones, himnos y la presentación del Ballet Folclórico deTlaxcala con bailables típicos como: “Xochipitzahuatl”, “LosNegritos”, “El jarabe tlaxcalteca”, “Danza de los Cuchillos“La Culebra”, entre otros.
La misa de canonización está programada a las 10:00 horas,tiempo de Roma, pero en México serán las 03:00 de la madrugada,momento en que los más de dos mil asistentes que se espera acudana la explanada del Parque Hidalgo, frente a la Parroquia de NuestraSeñora Santa Ana, vivirán la misa que se transmitirá por elcanal María Visión, a través de pantallas gigantes, con laexplicación paso a paso del sacerdote Agustín Cuamatzi, en sucalidad de Doctor en Sagrada Escritura y testigo de otrascanonizaciones en el Vaticano.
“Para nosotros este acontecimiento es un reconocimiento atodos los que de alguna manera han colaborado en este proceso quellega a su culmen el 15 de octubre… en Chiautempan reconocemos lainiciativa que tuvo el extinto obispo Don Luis Munive y Escobar,originario de Santa Ana y quien con su visión desde 1977 inicióeste proceso de canonización y fue una pieza fundamental”.
Incluso, al aportar elementos históricos, testimonios, favoresy la devoción del pueblo de Tlaxcala, los tres Niños Mártires deTlaxcala fueron declarados beatos por el Papa Juan Pablo II, en laBasílica de Nuestra Señora de Guadalupe de la Ciudad de México,el 6 de mayo de 1990.
El sacerdote agregó que el proceso fue complejo, peromanifiesta la seriedad y formalidad de la declaración de lasantidad de los niños.
“Y al mismo tiempo vale la pena que como tlaxcaltecasvaloremos la grandeza de nuestros pueblos indígenas porque ellossiendo muy pequeños tuvieron apertura y sabiduría para aceptar lafe que trajeron los primeros evangelizadores franciscanos,encabezados por Juan Díaz, primer sacerdote secular que inclusobautizó a los cuatro caciques principales de Tlaxcala y cuyopadrino y testigo fue Hernán Cortés”.
Detalló que Cristóbal, llamado también con el diminutivo“Cristobalito”, nació en Atlihuetzia, Yauhquemehcan, entre1514 y 1515 y era el hijo predilecto y heredero del caciqueAcxotecatl y asistió a la escuela de los misionerosfranciscanos.
Tras una discusión, en 1527, el muchacho comenzó a romper losídolos paganos de su padre, por lo que éste lo molió a golpes yluego lo empujó a una hoguera, de donde su madre lo salvó, peromurió unos días después, esto a los 13 años.
Antonio y Juan nacieron entre 1516 y 1517 en Tizatlán,Tlaxcala. Antonio era nieto y heredero de un cacique local,mientras Juan era su servidor; ambos también asistían a laescuela de los franciscanos.
Ellos decidieron acompañar a unos frailes en una expedición aOaxaca, para fungir como intérpretes ante otros indígenas. Peroen Cuauhtinchán, Puebla, fueron atacados por algunos lugareñosmientras recogían los ídolos de barro.
Primero golpearon con palos a Juan, que murió al momento yAntonio fue agredido hasta la muerte por reclamarles a los asesinosel crimen que acababan de cometer.
Datos históricos refieren que los cadáveres de ambos fueronarrojados en un terreno cerca de Tecalco y posteriormenterecuperados y trasladados a Tepeaca, donde recibieron cristianasepultura.