En el estado se registran por lo menos 400 peregrinaciones hacia la Basílica de Guadalupe y, desde el pasado lunes, diversos grupos avanzaron por los municipios de Tlaxcala para llegar al pie de la Virgen del Tepeyac, en la delegación Gustavo A. Madero, Ciudad de México.
Movidos por su fe, cientos de peregrinos cruzan las principales arterias del estado para dirigir sus pasos hacia el templo mariano; algunos a pie, otros en bicicleta, unos más en camiones o autos particulares, pero siempre cobijados por la ilusión de visitar a la llamada Madre de Dios.
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De acuerdo con ciclistas de Ixtacuixtla, desde hace 22 años consecutivos se han organizado para visitar a la “Reina de México” y comúnmente su salida es el seis de diciembre, pues visita a la Morenita antes del 12, justo cuando la celebran.
El grupo de jóvenes uniformados comentaron que antes de iniciar la travesía escucharon misa a las seis de la mañana, en el domicilio particular de un miembro voluntario donde recibieron los parabienes y bendición de un sacerdote, un rosario elaborado de madera y alimento que les proveerá de energía para su peregrinar por 138.3 kilómetros hasta el templo religioso.
En punto de las siete de la mañana salieron acompañados de familiares, los cuales abordaron unidades colectivas adornadas para formar una valla de protección, es decir, un vehículo se coloca frente a los ciclistas y dos de ellos atrás, el resto de unidades, entre ellas una de carga, se queda más atrás para vigilarlos.
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A los “novatos”, el viaje empieza a pesarles, pero se aligera al encontrase a otros grupos de peregrinos organizados de distintos municipios como Chiautempan, Nativitas, Tepeyanco, Huamantla, Calpulalpan, por señalar algunos.
Los experimentados tomaron ligero el inicio del viaje, para soportar el alto kilometraje que ofrece el camino, mientras que el cansancio para los nuevos se hizo presente y tuvieron que subir al camión de carga para reposar.
Aquella romería se sumará a la que emprenderán cientos de peregrinos tlaxcaltecas, acompañados de mujeres y niños que, sin importar las inclemencias del tiempo, buscarán postrarse al pie del Tepeyac.
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En diversas arterias de la entidad se observan peregrinaciones a pie, en bicicleta, motocicletas o vehículos, acompañados de sirenas de patrullas municipales que dan protección y custodia hasta salir de la entidad. Algunos fieles católicos cargan la imagen de la “morenita” a su espalda. banderas tricolores y esculturas de bulto de la Reina de México y Emperatriz de América, pues dicen que les ayuda para llegar con bien a su destino.
- Los peregrinos viajan acompañados de vehículos que forman una valla de protección: uno se coloca frente a los ciclistas y dos atrás, el resto de unidades, entre ellas una de carga, cierran la comitiva.