Las manos de los campesinos son una manifestación de fe, venimos a bendecirlas para que produzcan alimentos para el autoconsumo de las familias tlaxcaltecas una vez que se establezca el temporal de lluvias, expresó el obispo Julio César Salcedo Aquino en San José Cuamantzingo, municipio de Muñoz de Domingo Arenas.
Después de la visita que hizo a enfermos de la comunidad, manifestó que celebran a San Isidro Labrador y “le pedimos a Dios que interceda para que pronto venga la lluvia porque no es suficiente, todavía hay sequía”.
El pasado lunes, en la víspera de la fiesta en honor a San Isidro Labrador, patrono de los hombres del campo, el jerarca católico manifestó que antes de bendecir los instrumentos y maquinaria agrícola, “primero bendecimos las manos porque con sus acciones cambian el entorno, hacen el bien y de las tierras nacen las milpas”.
En el ejido de San José, considerado el granero más importante de Tlaxcala, exhortó a las familias para que dediquen un tiempo a la oración para que los fenómenos climáticos no sean destructores en el campo como ha pasado en otros ciclos de temporal que conllevan a la sequía.
Ante unos 200 productores (mujeres, hombres y niños) el religioso dijo que los integrantes de la parroquia de San Lucas, la feligresía es obediente a Dios. “Es un pueblo muy trabajador porque se encargan de producir los alimentos que llegan a nuestras mesas, por eso oramos a Dios para que levanten cosecha al concluir el ciclo en el mes de diciembre”.
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Después, en entrevista, enfatizó que visita las comunidades de Tlaxcala donde encuentra rezago social y pobreza, personas que no tienen las tres comidas al día y enfermos que requieren de intervención quirúrgica, pero no tienen seguridad social.
El Obispo de los enfermos, -como le dicen en algunas comunidades de Tlaxcala- mencionó que en la visita pastoral a las comunidades “quisimos tener este encuentro con los campesinos y bendecir sus manos y la maquinaria agrícola como un signo de la cercanía del amor y de la misericordia de Dios para con ellos y sus familias”.
Respecto a la sequía que enfrenta el sector primario, pidió que el Señor se compadezca de la población “pues dice el evangelio que para Dios no hay imposibles y esperamos su bendición hacia los campesinos que han preparado la tierra de cara al temporal.
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-Señor Obispo, lo busca la gente que está enferma y necesitada, ¿qué le piden?
-“Hay personas que no salen de casa, que viven una situación difícil ante las enfermedades, ayer (el lunes) celebramos una misa de los enfermos en la parroquia de San Lucas, llevamos a cabo la unción de los enfermos, nuestro trabajo es de cercanía con ellos aquí en las comunidades donde se siente el dolor en situaciones difíciles y yo con gusto estoy con ellos, siempre le pedimos a Dios que tenga misericordia de nosotros”, aseguró.
En San José Cuamantzingo, José N., se acercó al obispo de Tlaxcala, Julio César Salcedo Aquino, para pedirle su bendición ya que en breve viajará a los Estados Unidos de América, (EE. UU.) para trabajar pues “aquí no alcanza lo que gano para mantener a la familia”.
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“Señor, deme su bendición me voy al norte a trabajar aquí no podemos ahorrar para construir la casa”, expresó José al religioso.
-¿Ya lo pensaste bien, tienes autorización de tu esposa e hijos, para irte a los EE. UU.? -cuestionó el Obispo.
-“Sí”, respondió el campesino de 40 años de edad. “Voy por unos meses y si me va bien, mandaré dinero para que estudien y se alimente mi familia. Aquí los trabajos no son bien remunerados, le agradezco por la su bendición”, puntualizó.
EL TEMPORAL ES CRÍTICO: COMISARIADO EJIDAL
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En San José Cuamantzingo y todo Tlaxcala, la situación está crítica porque no nos llueve con regularidad, ahora, tenemos la esperanza de que nos vaya bien porque el temporal pasado solo cosechamos 700 kilos por hectárea, expresó Fausto Pastén, presidente de la Comisaria Ejidal de San José.
Expuso que a este problema meteorológico se suma que no han recibido el programa de fertilizante ni los apoyos para sembrar del Programa Bienestar para la Producción, al tiempo que el diésel ya está en 26 pesos el litro.
Agradecemos la visita de nuestro señor Obispo y de ustedes como representantes de los medios de comunicación para que constaten que sigue el calor, que hay sequía y que los jagueyes están vacíos, pero con un poco fe y esperanza podremos vencer los miedos y levantar la cosecha que condiciones normales es de cinco toneladas por hectárea de maíz híbrido, enfatizó.
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Precisó que en San José disponen de dos mil 300 hectáreas de ejido, no obstante, los 300 maquinistas trabajan más de siete mil hectáreas de cebada, trigo y maíz cada año.