Al concluir la festividad del Arcángel Miguel en el municipio de Nativitas, que fue visitado por alrededor de 2.5 millones de peregrinos, unas 600 familias de diferentes giros comerciales que incluye dulces de palanqueta y alegrías reportaron “buenas” ventas.
Cada año, del 20 de septiembre al 20 de octubre el Santuario del Arcángel Miguel recibe a cientos de peregrinaciones de diferentes entidades del interior de la República Mexicana. La celebración más importante tiene lugar el 29 de septiembre; la misa oficiada por el obispo de Tlaxcala, Julio César Salcedo Aquino, y es transmitida por María Visión.
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“Durante un mes nos tocó dormir bajo el puesto de cacahuates, entre la lluvia y el frío, en la vida siempre se sacrifica algo, nos regresamos contentos con un dinerito en la bolsa gracias a San Miguelito”, expresó Uriel Castrejón, comerciante de dulces proveniente de Chalma, Estado de México.
Recordó que hace 50 años su abuelo Tomás Castrejón comenzó este trabajo eventual en la preparación de palanquetas, alegrías, jalea, camote y cacahuate con piloncillo y miel de abeja.
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El comerciante explicó que al fallecer su abuelo, su progenitor Reinaldo Castrejón y su esposa, dieron seguimiento a la venta de dulces artesanales. “Se dice fácil, pero es medio siglo de tradición, de estar aquí vendiendo cacahuate tostado a los peregrinos”, destacó.
No obstante, aclaró que sufrieron durante 30 días porque durmieron sobre unas tablas para que no les robaran su mercancía. “Los servicios son muy caros, hotel y comidas, para bañarse hay que pagar 60 pesos diarios, lo bueno es que nos conocen y nos hacen un descuento”.
Dijo que desde que tenía 16 años de edad, acompañaba a sus padres a las diferentes ferias en el interior de la República Mexicana y comentó que desde que estudiaba la secundaria no fue bueno para comprender español y matemáticas y, por eso, “dejamos la escuela, ahora el comercio está proyectado en nuestras vidas”.
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Mencionó que las autoridades de San Miguel del Milagro les cobraron mil 500 pesos por metro lineal para cada puesto ambulante y explicó que adquirieron 10 metros lineales porque los domingos venden cocoles de pan que elaboran en Chalma, estado de México como una tradición.
Durante un mes, alrededor de 600 comerciantes se instalaron en las calles de San Miguel del Milagro para comerciar sus productos durante la celebración al Arcángel Miguel, Príncipe del Cielo, que se apareció en 1631 en la comunidad de San Bernánbe Capula, municipio de Nativitas.