Tierras de uso agrícola que colindan con la línea de ductos de Petróleos Mexicanos a lo largo de dos kilómetros, en Calpulalpan, presentan contaminación por hidrocarburo, de ahí que productores aseguraron que es consecuencia de constantes derramas de combustible que se registran en diferentes parajes, por lo que pidieron a personal de la paraestatal y militares aumentar la vigilancia para evitar más afectación.
Tras recorrer diferentes parajes, principalmente en el que se conoce como San Agustín, campesino constataron que existe contaminación por hidrocarburo en tierras de labor, ya que “las constantes fugas de combustible afectaron el suelo en un considerable número de hectáreas y el temor es porque, al quedar estériles, dejarán de producir”.
El presidente del Ejido San Antonio Calpulalpan, Manuel Jiménez Márquez, afirmó que el subsuelo capta el combustible y esto afecta cultivos de maíz, trigo, haba y cebada, entre otros, ya que al estar contaminada la tierra deja de producir, mientras que en los predios que tienen cultivos se secan las plantas, por lo que “al paso que van las cosas llegará el momento en que, al abrir la llave en las casas, saldrá agua con olor a diésel”.
Comentó que ante la exigencia de ejidatarios afectados, dialogó con personal de fuerza física de la paraestatal y con el comandante de la brigada militar que se encuentra apostada en la comunidad de Santa Isabel Mixtitlan, con el fin de solicitar que incrementen la vigilancia para evitar más fugas de combustible, pero argumentaron que al menor descuido se percatan de que fue abierto el ducto.
Agregó que sostuvo una reunión con campesinos, quienes le pidieron que solicite apoyo en dependencias federales y estatales, para que implementen alguna medida que permita erradicar el daño ecológico que ocasiona el derrame de combustible en tierras de labor, ya que hasta el momento el problema rebasó a las autoridades competentes.
El combustible afecta el ph del suelo, pues daña su conductividad eléctrica
Manuel Jiménez / Presidente del Ejido San Antonio