Entre un entorno de miseria y suciedad, Armanda N. vive a diario un viacrucis diario, debido a la falta de atención de familiares y autoridades de asistencia social.
Un cuarto con techo de lámina, sin los servicios básicos como agua y luz, es su refugio en Santa María Tlacatecpa, Sección Sexta del municipio de Contla de Juan Cuamatzi. Sus únicos acompañantes son dos muñecos de peluche.
A la mujer de 65 años de edad la diabetes le ha provocado retinopatía diabética, esto es, problemas de visión, además, recientemente sufrió una caída que lesionó sus rodillas y le impide caminar.
Así, postrada en un colchón al ras del suelo, con unas cuantas cobijas que la protegen de las heladas de la temporada invernal, entre lágrimas y súplicas Armanda pide ayuda urgente, pues dice que la han olvidado.
Afirma que solo un hermano es quien acude a dejarle de comer de vez en cuando, así que se tiene que valer por sí misma para subsistir, pues la dejaron abandonada en ese lugar.
Por su condición, usa pañal para adultos y son algunos vecinos que se acomiden para cambiárselos.
Antes, caminaba hasta el Hospital Comunitario de Contla para inyectarse insulina, ahora, debido a que no puede caminar, ya no lo hace. Su salud está en evidente decadencia.
Con voz entrecortada, dijo llegó a vivir al cuarto, que no es de su propiedad, y agradece a los dueños que no la echen a la calle. “La propiedad es de los familiares del difunto Lucio Cabañas, así le decían, espero que me dejen aquí, hasta que alguien se apiade de mí”.
Armanda N. comentó que posee un terreno en la misma comunidad que heredó de sus padres, pero a decir de algunos vecinos del lugar, la propiedad pasó a manos de uno de los sobrinos de la mujer.
AYUDA
- Armanda N. habita en Santa María Tlacatecpa, municipio de Contla de Juan Cuamatzi, requiere urgente atención médica y de alimentos, así como un lugar digno para vivir.
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