El historiador de San Pablo del Monte, Hugo Ramos Rodríguez, reconoció que la elaboración de productos de talavera es actualmente una de las actividades más complejas que el hombre realiza, específicamente en la zona centro de Puebla y el sur del estado de Tlaxcala, ya que el barro como materia prima, pasa por diferentes procesos, desde el ser remojado durante más de seis horas hasta el de ser decorado por tintas que se aplican con brocha de pelo de conejo y finalmente ser puesto a la venta con cantidades que van desde los 50 hasta los tres mil pesos, cantidades que valoran todo el trabajo artesanal por el que es sometido.
Refirió que al hablar de zonas geográficas, hasta el día de hoy es un dilema el definir donde fue creada primero la talavera.
Muchas personas, entre ellas Fernanda García, adjudican a Puebla como la zona donde llega este producto, ya que según menciona la talavera es el resultado del envío de alfareros desde España para fabricar la famosa Talavera de la reina, quienes una vez llegados a México, establecen una locería en el actual centro histórico de la ciudad de Puebla, por eso, actualmente se dice que la talavera es tan poblana como el mole o el chile en nogada.
Pero, argumento que existe una investigación arqueológica por parte de Maricarmen Serra Puche, quien realizó una exploración durante 20 años en la zona de Cacaxtla-Xochitecatl, mediante excavaciones y estudios, dando como resultado la localización de un taller de cerámica con utensilios elaborados en el año 600 después de Cristo.
Esto indica que en realidad hay más antigüedad en la cerámica y talavera en Tlaxcala que en Puebla y esto puede ser un aporte necesario para solicitar un certificado de origen de la talavera tlaxcalteca, por parte de las autoridades estatales.
Ramos Rodríguez señaló que esto es un tema de debate y al igual que los límites territoriales entre Puebla y Tlaxcala, se puede sumar donde fue elaborado primero la talavera, si en Puebla o en la ciudad más antigua del país nunca colonizada por españoles y en donde actualmente es San Pablo del Monte, unos de los 60 municipios de Tlaxcala que preserva la elaboración de estos productos, con más de 40 talleres distribuidos en los 12 barrios del municipio y que hacen su distribución y venta en la zona centro de la ciudad de Puebla y muchos estados de la República Mexicana y que demuestran que sin duda la talavera merecía ser nombrada como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad.
Añadió que una de las actividades más antiguas que el hombre ha realizado desde tiempos neolíticos es la cerámica, tomando como elemento principal al barro, que es uno de los elementos más puros con los que se pueden hacer diversas transformaciones y originar objetos de toda naturaleza.
Sostuvo que a partir de varios elementos derivados del barro es donde la creatividad sale a relucir con las diferentes decoraciones que hacen ver a estos objetos como elementos únicos y diferentes a la porcelana, por dar algún ejemplo.
En realidad hay más antigüedad en la cerámica y talavera en Tlaxcala que en Puebla
A 500 AÑOS
- Con la llegada de los españoles a nuestras tierras, en 1519 la elaboración de productos de barro sufre transformaciones como la mayoría de productos fabricados en la época prehispánica, y a 500 años de distancia la conocemos como talavera.
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