Los visitantes que acudieron a la Noche que Nadie Duerme y la corrida de toros de las Luces en Huamantla, si bien dejaron una importante derrama económica, generaron unas 360 toneladas de basura (orgánica e inorgánica), informó Miguel Salinas Hernández, titular de Servicios Municipales.
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Dijo que a las diez de la mañana del 15 agosto, las calles del centro histórico estaban limpias y los residuos fueron depositados en el basurero de la comunidad de Benito Juárez.
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Eso sí, dijo que contrataron a trabajadores eventuales durante los días más importantes de la Feria Internacional del Arte Efímero y de la Dalia.
Estamos hablando de materia orgánica e inorgánica que cada uno de los 250 mil visitantes dejó antes, durante y después de la procesión de la Virgen de la Caridad, destacó.
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Refirió que el manejo de material pétreo -como la arena- y los maderables -como el aserrín y sus derivados-, que utilizaron para diseñar los tapetes en 33 cuadras, tuvieron un destino diferente, aunque el polvo fue transportado al tiradero de Juárez.
Explicó que después de la procesión de la Virgen de la Caridad los artesanos retiraron los residuos de los tapetes, fue una tarea coordinada que tuvo éxito, por la mañana la ciudad estaba limpia, resaltó.
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Precisó que fueron 163 trabajadores adscritos a la dirección de Servicios Municipales y contratados durante los días festivos.
Salinas Hernández expuso que estas acciones de saneamiento fueron llevadas a cabo con diez camiones, siete compactadores y tres volteos.