Desde hace nueves años, EnriqueMorales León, cumple una manda y regala 300 pastelitos a quienesasisten a misa Este 14 de febrero, en la parroquiade San José, ubicada en la capital de Tlaxcala, cientos defeligreses festejan al “Niño Bondadoso”, una imagen del NiñoDios que año con año es venerado y a quien acuden a agradecerleslos favores realizados, pues de acuerdo con algunos de losasistentes, es muy milagroso.
Con música de mariachi, adornos de globos y florales, losfeligreses acudieron esta mañana gustosos a la celebracióneucarística que año con año se realiza y donde cada vez acudenmás católicos.
Unos de los que llega a primera hora desde 2009, es EnriqueMorales León, de oficio vendedor de pastelitos, quien asegura quedesde entonces hizo el juramento de que año con año acudiría avenerar al Niño Bondadoso y regalar al menos 300 pastelitos aquienes acuden a la misa, “y mientras Dios me presta vida, aquíestaré presente, pues hice esa promesa y la voy a cumplir porqueel Niño Bondadoso es muy milagrosos, al menos conmigo”.
Además de Enrique Morales, hay otras personas que tambiénregalan tamales, mientras tanto feligreses acuden con devoción, almenos a persignarse ante el Niño Bondadoso que este día ocupa elaltar principal de la parroquia de San José.
