Molestos porque acusaron que personal del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) actualizó la cartografía a favor de Chiautempan, pobladores de Tlaltelulco se apostaron frente a las instalaciones de ese organismo para manifestarse y después arrojaron piedras a ventanales y camionetas oficiales estacionadas en el interior de la dependencia federal.
Desde las 9:00 horas de ayer, unas 50 personas acompañadas de delegados y regidores cerraron con cadenas los accesos y colocaron una manta con la leyenda "Inegi La Magdalena Tlaltelulco pide respeto al Decreto 207 de 1995. Exigimos respeto a nuestro territorio", para luego provocar desmanes.
Los hombres y mujeres comenzaron a gritar al unísono "Queremos solución, Inegi vendido, pero Tlaltelulco unido, jamás será vencido", no obstante pidieron un equipo de sonido para exigir que los atendiera el coordinador del instituto, Carlos Manuel Lozano García.
Mientras transcurrían las horas, la gente se desesperó pues no recibían respuesta, por lo que las protestas arreciaron y, con piedras, dañaron los vidrios del inmueble y camionetas estacionadas al interior.
Por el temor de mayores destrozos, el personal del instituto pidió vigilancia de la policía capitalina, la cual envió a elementos a bordo de varias patrullas, pero solo se limitaron a observar a la distancia.
Al lugar de los hechos arribó el alcalde de Tlaltelulco, Rubén Pluma Morales, quien señaló que la población lo ha presionado para lograr la solución al conflicto territorial que tiene más de 25 años.
Sobre los encuestadores, se limitó a señalar que no existe una determinación si podrán entrar o no a las zonas de conflicto, puesto que en un principio ese fue el acuerdo y no lo han respetado.
“Si se dejará de censar que nos lo hagan saber de forma escrita, que nos lo garanticen y que además respeten la cartografía, pues sabemos que la cambiaron a favor de Chiautempan”, soltó.
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