Al ritmo de pasos dobles y sones mexicanos, la Banda Juárez, oriunda de Huamantla, no sólo animó a las parejas a bailar en medio de las calles por las que transitó el tradicional Desfile de Burladeros, sino que también encabezó la emocionante 'quema de toritos', donde chicos y grandes disfrutaron del espectáculo de fuego.
Más de diez toros pirotécnicos manejados rítmicamente por hombres y mujeres recorrieron las principales calles del pueblo mágico. A su vez, dos estructuras metálicas de casi dos metros vestidos con pirotecnia y diseñados a manera de astados gigantes se robaron las cámaras y los aplausos del público al iluminar las calles con sus chisperos.
A la brillante función se sumaron curiosos y valientes jóvenes que desde ahora ya están preparando sus mejores pases y suertes para la Huamantlada, a celebrarse mañana sábado.
Por su parte, diversos asistentes al desfile presumieron que ya cuentan con los icónicos pañuelos rojos con los que recibirán el festejo taurino. Mientras cayó la noche, pusieron alegría al recorrido, con pulque en mano y al grito de ¡torito, torito!