Por enésima vez, comerciantes de los tianguis que se instalan en el municipio de Contla de Juan Cuamatzi incumplieron con el compromiso de endurecer las medidas de prevención ante la pandemia de la Covid-19.
Al grito de “llévele, llévele”, la mayoría de los mercantes alentaba a los consumidores a comprar sus productos con su cubrebocas al cuello o a la barbilla, otros al ver la cámara de El Sol de Tlaxcala se chiflaban para colocarse el protector que le cubriera nariz y boca.
También se incumplió en la venta de productos no esenciales y había puestos de sombreros, celulares, zapatos, dulces y productos de segunda mano, entre otros.
Y es que el lunes pasado, los tianguistas se negaron a ser reubicados en la Avenida Morelos con el argumento de que el panteón municipal era el impedimento por el polvo insalubre que se respira en el lugar.
Lo anterior molestó a los vecinos de la zona, quienes alegaron que han vivido por muchos años cerca del cementerio sin problemas de salud.
Al respecto, Carmen Netzáhuatl dijo: “tenemos una carnicería, tiendas, está la comandancia de policía, muchas casas alrededor e incluso una farmacia y hospital, entonces cuál problema hay para que ellos se instalen un solo día”.
Además, durante las primeras horas del tianguis en la Sección Séptima, el filtro sanitario fue intermitente, con dos menores de edad que repartieron gel antibacterial en el acceso a la plaza y permitieron la entrada a personas que no portaran cubrebocas, otras más se negaron a recibir el antiséptico.
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