La elaboración de alfarerías y artesanías a base de barro en los municipios de Ixtacuixtla, Españita y Tzompantepec está paralizada a causa del mal tiempo, las lluvias registradas desde hace un mes, no han permitido que el barro tenga un secado adecuado para que ingrese a los hornos.
Lo anterior perjudica a un centenar de familias que subsisten de la venta de estos productos que elaboran con sus manos. “Los materiales que llegan del estado de Hidalgo están húmedos y como no hay días soleados, no se puede trabajar”, explicó Modesta Tapia, alfarera de Tzompantepec.
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Mencionó que desde hace 45 años trabaja el barro junto con su esposo Ezequiel Álvarez, lo que ha permitido el sustento y estudios de sus hijos.
Recordó que todavía vivía su suegra, cuando los artesanos fueron capacitados por personal del Fideicomiso Casa de la Artesanías respecto a la quema en el horno a base leña y, en el caso de las cazuelas, sustituir el plomo por vidriado.
“Ya recibimos la pensión del gobierno federal, eso nos ayuda un poco porque no hay ventas, la verdad es que ya llovió más de lo normal que otros años y, eso nos impide trabajar el barro”, explicó.
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Comentó que este problema lo enfrentan unas 20 alfareros, la mayoría personas adultas. “La verdad es que recientemente no hemos tenido apoyos del gobierno estatal y los jóvenes ya no quieren trabajar, esto se está perdiendo poco a poco”, afirmó.
Dijo que venden los comales en diferentes comunidades de Tlaxcala, previo a las celebraciones patronales y en el tianguis de los martes de San Martín Texmelucan, estado de Puebla.