Aunque los instrumentos de doña Margarita Ocampo Reyes son un silbato y una bandera roja, no se trata de una árbitro de futbol; con la ocarina ordena el paso de los conductores vehiculares y con la bandera indica alto.
Así, esta mujer de 54 años de Santa Apolonia Teacalco, entre el constante peligro, se gana la vida diaria, funge como policía de seguridad vial, bajo un puente vehicular en el municipio de Ixtacuixtla.
Hace cuatro años, al no encontrar empleo en el Gobierno ni en con particulares, decidió hacerlo por cuenta propia pues las deudas aumentaban y no tenía para comer junto con su esposo.
En el puente que comunica a San Jorge Tezoquipan con la Trinidad Tenexyecac, bajo la autopista de la 'muerte' Tlaxcala-San Marttín Texmelucan, encontró el lugar propicio para ganarse la vida.
Sin embargo, el precio por obtener unas monedas no ha sido del todo exitoso, la tristeza y dolor la han embargado en tres ocasiones.
Recordó que de los tres accidentes solo uno se hizo responsable, los otros dijeron que soy un estorbo y se dieron a la fuga, me abandonaron.
Y agregó que: “(los conductores) me han lastimado con sus coches, tengo dolores en la cintura y en las piernas, pero bendito Dios han sido más satisfacciones”, explicó.
Ya que algunos conductores no respetan las indicaciones y señalizaciones de esta mujer y tampoco existe señalética a cargo de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, debe estar atenta al paso de los automotores.
Con visibles huellas de dolor en su pierna derecha que trae vendada, doña Margarita ya es conocida en ese sitio por su trabajo que realiza desde temprana hora.
Desde que tenía 50 años estoy aquí, dando el paso, no encontré trabajo y, ahora de aquí saco para comer, ya no tengo hijos, (lo que me dan) es para mí esposo y para mí, expresó.
Ella, a pesar de la discapacidad que enfrenta por uno de los accidentes sufridos, bajo el peligroso puente no desmaya; su trabajo es con actitud. “Mientras nos apoye la gente, aquí estaré ganándome la vida cuando no llueve, porque se hace un charco y algunos los automovilistas no tienen consideración”, puntualizó.
- La carismática mujer unas veces obtiene 70 pesos, pero cuando la gente es generosa en las quincenas se lleva hasta 130 pesos, en una jornada de 10 horas
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