“Mientras las piernas me respondan, seguiré patrullando las calles en la bicicleta, hoy cumplo 25 años de servicio a la población y mantener el orden”, expresó José Luis Méndez García, integrante del Escuadrón Ciclista Bravo, de Apizaco.

Antes de participar en el homenaje del alcalde Pablo Badillo Sánchez, dijo que su vida ha estado en riesgo en varias ocasiones en cumplimiento del deber, pero esas acciones “me han fortalecido en el Escuadrón y ahora soy una satisfacción para mis compañeros y mi familia”.

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“Me ha tocado estar en medio de las balaceras, perseguir a los delincuentes en la bicicleta y de capturarlos con el apoyo de mis compañeras y compañeros”, afirmó el oficial de 49 años de edad.

Cuando un niño se acerca a nosotros con su mamá y expresa que de grande quiere ser policía, eso nos motiva a seguir trabajando en la seguridad de los apizaquenses, comentó a este Diario.

Recordó que antes de que nacieran sus hijos Xóchitl Citlalli y Aramis Guadalupe, él ya era un policía certificado y acreditado.

-¿Lo que gana en la Dirección alcanza para sostener el estudio de sus hijos?

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-“Percibo cuatro mil 600 pesos quincenales, no es mucho pero es seguro, mi esposa me ayuda para que mi hija vaya a la Universidad y mi hijo a la preparatoria”.

Expuso que es el único oficial capacitado y con portación de arma de los 12 que empezaron hace 25 años.

Recordó que fue en 1999 cuando el entonces alcalde de Apizaco, Fernando León Nava, tuvo la iniciativa de conformar este grupo ciclista de policías.

Enfatizó que Mario Alberto Espinoza Vargas los capacitó y fue el primer comandante del Escuadrón Ciclista Bravo.

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Ya que son los primeros respondientes en una emergencia, expresó que dos policías tienen la capacitación como técnicos en urgencias médicas y atienden a la población antes de que lleguen los primeros auxilios.

Creo en un Dios que nos protege, nos toca cuando hay balas en medio, externó.

Dijo que cuenta con un seguro de vida y atención médica que les proporciona el ayuntamiento de Apizaco y espera que al retirarse a los 60 años reciba una pensión que le permita subsistir en la vejez.

"Cuando inicié en el Escuadrón Ciclista Bravo, mis hijos todavía no nacían, al año siguiente, ingresó mi hermano a esta agrupación, desde entonces, formamos parte de este grupo de reacción pues tiene como finalidad llegar en dos minutos a cada auxilio de la población”