El panteón de Zacatelco se encuentra al 100 % de su capacidad, por lo que recibirá a cientos de familias por la temporada de Día de Muertos.
El camposanto del municipio del sur del estado es de los más visitados en la región, ya que autoridades locales no han activado un espacio que lo sustituya.
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El gobierno de la pasada administración, encabezado por Tomás Orea Albarrán, adquirió un predio en los límites con Camino Real para ocuparlo como el nuevo cementerio municipal, pero problemas legales del ayuntamiento con laudos laborales han impedido su funcionamiento, al estar embargado.
Desde hace seis años, el panteón municipal alcanzó su máxima capacidad y durante las actividades de Día de Muertos, son más de 10 mil personas que acuden a colocar flores, cantar y orar por los familiares fallecidos y sepultados en este lugar, de la Sección Primera.
Héctor Carreto Coronel, responsable del panteón municipal, señaló que el panteón está al 100 %, por lo que quienes fallecen son sepultados arriba de donde enterraron a sus antecesores.
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“Es complicado recibir a los difuntos, no hay espacio”, comentó.
Ángeles Abriz Gómez, una comerciante de 49 años de edad, señaló que este será el segundo año, después de la pandemia, que esperan buenas ventas alrededor del camposanto, “cada año me ubico en la avenida Piedad para vender comida tradicional mexicana y he tenido buenos ingresos; la pandemia enfrió todo porque estuvo restringido venir al panteón, pero todo se ha activado y este año vamos por buenos resultados”.
En Zacatelco son más de 200 comerciantes que se ubican alrededor del cementerio municipal, la mayoría vende comida y lo hace en las avenidas Piedad y Cinco de Mayo, que son las principales para acceder.
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Los días uno y dos de noviembre son de mucha movilidad en el panteón, incluso hay dificultad para caminar por sus pasillos, señaló Antonio Montealegre Román, quien cada año llega a acompañar los restos de su padre, madre y dos hermanos. “Hay una capilla donde el párroco hace una misa en memoria de los fieles difuntos; son días de reflexión y de recordar a quienes más hemos querido”, refirió el ciudadano de la Sección Tercera barrio de Guardia.
Durante el Día de Muertos más de 30 mariachis llegan a cantarle a los fallecidos, “se escuchan por todos lados, cada familia crea un ambiente propio, incluso entre lágrimas rezan y piden por el descanso eterno de sus padres, hijos y hermanos”, enfatizó Cruz López Vargas, quien este año llevará flores a las tumbas de sus progenitores
Este año los días primero y dos de noviembre el camposanto permanece abierto de las 7:00 a las 21:00 horas, informó su responsable, quien recibe apoyo de 20 personas para hacer limpieza y mantener en buenas condiciones el lugar sagrado.