La policía municipal de Nopalucan es la única que ha enfrentado a la delincuencia desarmada, desde la creación del municipio, debido a la falta de capacitación y la no aprobación de los exámenes de control y confianza, admitió el alcalde Pedro Pérez Vázquez.
A días de haber tomado nuevamente la silla presidencial, tras la solicitud de licencia, el munícipe señaló que, al lograr la reelección, en su nuevo trienio habrá de abocarse a la gestión de armas de fuego para sus oficiales.
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A la fecha, comentó que ha creado la armería, espacio exigido por parte de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) para dotarle de armas de fuego largas y cortas al municipio, señaló que se trata de un primer paso con miras a armar a los efectivos.
En medio de crecientes preocupaciones sobre la seguridad pública en la entidad, dijo que la policía municipal enfrenta un desafío significativo debido a la falta de armamento adecuado para hacer frente a la delincuencia.
A pesar de que esa situación ha generado críticas y cuestionamientos sobre la capacidad de los agentes para proteger efectivamente a los ciudadanos y mantener el orden en la comunidad, el alcalde destacó la loable labor de sus elementos para actuar en forma preventiva, más que correctiva.
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Derivado de las críticas, se comprometió a asignar recursos propios para la mejorar las condiciones de trabajo de los agentes y a medida de lo posible adquirir arsenal propio, avalado por la SSC y de esa forma enfrentar los desafíos de inseguridad de manera más efectiva.
La falta de recursos adecuados, comentó Pérez Vázquez, ha llevado a situaciones donde los agentes han tenido que recurrir a métodos improvisados para disuadir a los criminales, como el uso de gas pimienta y bastones extensibles, que en ocasiones no son suficientes para enfrentar amenazas serias.
Insistió en que la falta de armamento adecuado representa un desafío significativo para la policía, pues afecta la capacidad para proteger a la comunidad y mantener la seguridad pública, pero los uniformados han ideado soluciones.