En tres semanas, Ixtenco pasó de ser un municipio reconocido por su riqueza cultural, a tener una imagen negativa por protestas sin fundamento de un reducido grupo de pobladores, lamentó el alcalde Miguel Ángel Caballero Yonca.
Esta situación ha provocado que intercambios culturales y académicos de trascendencia con representaciones de Cuba, Dinamarca, Suiza, Alemania y Francia, entre otros, hayan sido postergados.
En entrevista con El Sol de Tlaxcala, el munícipe del último reducto otomí de la entidad refutó las acusaciones vertidas en su contra, entre ellas que incurra en nepotismo, autoritarismo y mal manejo del erario.
Y es que los inconformes aún no han presentado ninguna prueba de ello ante autoridades del Gobierno del Estado que han intervenido para dar solución al conflicto y así la alcaldía sea reabierta.
Aunado a ello, también se ha empañado el procedimiento para convertir a Ixtenco en Pueblo Mágico, al inconformarse ciudadanos con los reglamentos que regulan, entre otras cosas, el cobro de licencias de funcionamiento, uno de los requisitos básicos que debe cumplirse para obtener el recurso federal.
Explicó que a raíz del conflicto, suscitado el pasado 15 de enero, día en que rindió su primer informe de labores, se han postergado invitaciones de índole cultural que otras naciones habían hecho al municipio.
Entre otras cosas, detalló que Ixtenco había sido invitado para llevar el otomí, lengua materna de la comuna, más allá de nuestras fronteras, así como algunas artesanías elaboradas por pobladores, entre las que destaca el tejido de camisas de pepenado; cuadros de semilla; figuras hechas con hoja de maíz; una demostración de la variedad de maíz; el coro Yumhu y parte de la gastronomía como el “Mole de matuma” y el atole agrio.
En el caso del convenio con Cuba para llevarse a cabo a finales de junio, se tenía programado participar en un festival internacional-cultural en La Habana, mientras que, con la Universidad de Camagüey firmarían un convenio de colaboración en materia de educación para combatir el rezago en su demarcación.
- Refuta acusaciones; pide pruebas
Convencido de que las acciones que implementa regresarán la gobernabilidad a Ixtenco, pero sobre todo de que le permitirán a ese territorio un desarrollo económico y cultural, Caballero Yonca aseguró presidir una administración de puertas abiertas y que vela por que sean respetadas las garantías individuales.
Al pedir a los inconformes que el eje principal de sus demandas sea el respeto hacia las autoridades, aseguró que en tanto no presenten pruebas o algún sustento las acusaciones en su contra son infundadas.
De hecho, consideró que las imputaciones son emitidas por un reducido grupo de ciudadanos que persiguen intereses políticos individuales y ajenos al desarrollo de la comuna.
Es más, afirmó que desde que asumió la presidencia de Ixtenco ha velado por mantener una disciplina financiera a través del ahorro y que la trasparencia ha sido uno de los ejes rectores de su gobierno, de ahí que dijo que quienes quieran tener información a detalle deberán hacerlo a través de los canales institucionales.
Descartó y negó de manera rotunda un gobierno de terror, que intimida a la gente a través de las redes sociales con perfiles falsos o de manera física y verbal a quienes critican su administración, eso incluso a pesar de que ha sido amenazado de muerte.
Los policías municipales, aseveró, no están al servicio del alcalde ni de ningún funcionario de la comuna, pues comentó que los 33 elementos (en el gobierno municipal anterior habían 20) diariamente hacen sus recorridos por toda la demarcación, y contrario a lo que señalan los inconformes, las estadísticas indican que el índice delictivo disminuyó en 2017.
Comentó que en su administración tampoco hay nepotismo y sostuvo que el único familiar que labora en el ayuntamiento, con un cargo honorifico, es su mamá.
Así, al aseverar que no existen pruebas que demuestren las acusaciones en su contra ofreció una postura de respeto a la pluralidad de opiniones que existen en la demarcación, pero los instó al dialogó, a la tolerancia y a una comunicación efectiva.
En tanto, el Gobierno Estatal, a decir del alcalde, fungirá como mediador del desacuerdo, en pos de salvaguardar la integridad de la ciudadanía.
- ASÍ LO DIJO
“Para una pelea tenemos que ser dos, y nosotros (autoridad municipal) tenemos que ser prudentes y tolerantes”
“En Ixtenco nadie por encima de la ley, vamos a esperar a que se agoten los procedimientos y si yo debo algo que sean las instituciones quienes me lo observen y me sancionen si así debe ser”
“No estoy ni preocupado, estoy ocupado para hacer que Ixtenco crezca, ese fue mi objetivo y es por qué cambie drásticamente de un sector a otro sector (de trabajar en el ámbito privado al público)”