Un peculiar rescate de un menor de edad que padece de sus facultades mentales se registró la tarde de este lunes en el municipio Apizaco.
El binomio canino perteneciente a la Dirección de Seguridad Pública de Tzompantepec, también conocido como “K-9”, fue el responsable de dar con el paradero del infante que fue reportado como extraviado tras salirse del Centro de Atención Múltiple (CAM) de San Andrés Ahuashuatepec.
La desaparición fue reportada alrededor de las 14:10 horas por la directora del CAM, María Eugenia Flores Gamboa.
A los pocos minutos efectivos municipales, encabezados por el director de la corporación, César Hernández, acudieron a las instalaciones de la institución para hacer un recorrido por la zona y lugares aledaños, pero al no tener respuesta positiva solicitaron el equipo de rescate canino.
Una prenda del menor que previamente fue introducida a una bolsa caliente para que una perra llamada “Gitana” percibiera el olor permitió dar con su paradero a través del olfato canino.
El operativo de búsqueda tardó aproximadamente dos horas y, de acuerdo con el reporte policiaco, las esperanzas eran mínimas ya que cada vez se alejaban del lugar donde el niño había sido visto por última vez.
No obstante, fue en territorio rielero donde el menor de edad pudo ser localizado por el equipo de rescate y una vez confirmada su identidad procedieron a trasladarlo de regreso a su tierra natal.
Al ser valorado por los efectivos para descartar posibles agresiones o lesiones, el menor fue entregado a los familiares sano y salvo, terminando el drama con final