Ejidatarios del municipio de Apizaco denunciaron que un grupo de personas abrió las compuertas de la presa Apizaquito y el agua fluye sin control.
Dijeron que, del domingo a la fecha, el cuerpo de agua ha perdido más del 60 % de sus niveles máximos y, de persistir, podría secarse.
Mencionaron que las más de 40 hectáreas de espejo de agua sirven para que se aniden y reproducen diversas especies de aves.
Además, comentaron que el cuerpo de agua sigue siendo un espacio de recreación para la pesca deportiva pues crecen mojarras, carpa y charal.
Este Diario constató que en los últimos años, la presa comenzó a secarse ante la ausencia de lluvias continuas.
El área está azolvada, llena de lirios, tule y residuos sólidos contaminantes que los turistas dejan al visitar la presa.
Ante ello, dijeron que acudirán con el alcalde de Apizaco, Julio César Hernández Mejía, para que instale compuertas a fin de que agua no se fugue a los ríos.
EXIGEN SOLUCIÓN
- Los quejosos anunciaron que solicitarán la intervención de la Comisión Nacional del Agua y de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, toda vez que está en riesgo la flora y fauna de la región.
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