Con la salida del Primer Agrupamiento de la Gendarmería adscrito a la Policía Federal de Tlaxcala seguramente aumentará la incidencia delictiva, pues cuando ellos estuvieron coadyuvaron en tareas de seguridad, coincidieron alcaldes.
Entrevistados por separado, dijeron que durante el año que estuvieron en la entidad los gendarmes hicieron un trabajo de proximidad social con la población.
Inclusive, comentaron que con el equipo moderno con que cuentan, las patrullas y armas de alto poder, inhibieron el delito en zonas de los municipios consideradas focos de inseguridad.
Julio César Hernández Mejía, alcalde de Apizaco, manifestó que al trabajar en forma coordinada con la Gendarmería “atacamos zonas difíciles del municipio y detuvimos a varios delincuentes, pero desde hace tres meses que no estén, es una lástima que se hayan ido”.
En tanto, Arturo Rivera Mora, alcalde de Tzompantepec, mencionó que su trabajo a favor de la seguridad tuvo que ver con la proximidad social en escuelas.
Eleazar Molina Pérez, munícipe de Tetla de la Solidaridad, sostuvo que la presencia de los gendarmes fue fundamental para la seguridad de la comuna en el primer año de administración.
Dijo que los elementos participaron en diversas tareas con la población y capacitaron a la policía municipal a fin de contener a los hampones.
Enfatizó que la Gendarmería tenía como objetivo resguardar las actividades productivas en el estado a fin de mantener el desarrollo económico de la entidad, por lo cual, contará con 25 unidades para la adecuada ejecución de acciones de seguridad.
Por su parte, el alcalde de Mazatecochco, José Esteban Cortés Torres, refirió que requieren el apoyo de las diferentes corporaciones para abatir la inseguridad y “más en estos tiempos en donde el mismo comisionado de seguridad estatal nos ha hecho comentarios que el crimen organizado invade y que entra a diferentes municipios”.
Mencionó que el temor existe por la situación que se vive y es mayor “si tenemos desprotegida la zona y quitan el respaldo de la Gendarmería”.
Quien dio un enfoque distinto al de otras autoridades fue Fernando Tlapaya, Comisario de Seguridad Pública de San Pablo del Monte, quien argumentó que su municipio está blindado con una base militar y el filtro fronterizo Tlaxcala-Puebla el que tiene participación de las policías federal, estatal y municipal con presencia del Ejército mexicano.
Estableció que no es una buena noticia el que se retire de la entidad la Gendarmería, pero “en San Pablo del Monte hay una labor especial en materia de seguridad pública por su cercanía con Puebla”.
En esta comuna cuentan con un centro de seguridad en donde trabajan coordinadamente los tres niveles de gobierno.
Por su lado, presidentes municipales de Nopalucan, Panotla y Texoloc, comentaron que referente a la desaparición de la policía de Gendarmería en el Estado, esto les obliga a incrementar más la seguridad en sus demarcaciones.
Enfatizaron que esto hace a que se vea la manera de contratar más elementos policiacos y se dará siempre y cuando también sean apoyados con más recurso.
En el caso de Panotla, el alcalde Eymard Grande Rodríguez agregó que “estamos trabajando para reforzar la seguridad en el municipio, muestra de ello es la adquisición de tres nuevas patrullas de las cuales dos se asignaron a los módulos regionales de seguridad ubicados en Tezoquipan y Huiloapan, para reforzar los recorridos para la prevención e inhibición de conductas delictivas; se adquirieron equipos de radiocomunicación para mejorar los enlaces con las comunidades y así dar pronta y oportuna atención a los ciudadanos”.
OPINIÓN CONTRARIA
Quien dio un enfoque distinto al de otras autoridades fue Fernando Tlapaya, comisario de Seguridad Pública de San Pablo del Monte, quien argumentó que su municipio está blindado con una base militar y el filtro fronterizo Tlaxcala-Puebla el que tiene participación de las policías federal, estatal y municipal con presencia del Ejército mexicano.