Pobladores de Panotla, Totolac e Ixtacuixtla pasaron la cuarta noche con sus domicilios contaminados.
Por más que cerraron sus puertas, el penetrante olor a plástico ingresó a sus hogares y no pudieron dormir.
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Fue otra noche en el que se manifestó malestar en garganta y nariz de adultos y niños, hijos de militares.
Las primeras familias afectadas habitan en el fraccionamiento de la 23 Zona Militar, pero la contaminación alcanza a la cabecera municipal de Panotla, Totolac e Ixtacuixtla.
En fraccionamientos como La Virgen, Santa Elena tampoco hay calidad del aire para respirar. En comunidades de Zaragoza, Techachalco y Acatitla pasa lo mismo.
Es el segundo día de suspensión de actividades escolares y físicas en interiores y al aire libre.
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En la autopista Tlaxcala-San Martín Texmelucan persiste el humo; no se alcanza a observar a 10 metros.
En este sitio, frente al Primer Regimiento Mecanizado los automotores desarrollan alta velocidad y no hay patrullaje vial.
Se observan camiones de carga con cabezas de ganado que llevan por destino el Tianguis Ganadero en Villalta en Tepetitla de Lardizábal.
Ayer por la noche, Pedro Aquino Alvarado, encargado del despacho de la Secretaría de Medio Ambiente informó que todavía no se tenía control del incendio.
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Seguimos combatiendo, seguimos atacando el fuego, esperamos tener pronto una respuesta favorable escribió en un mensaje de WhatsApp a este Diario.
