El bloqueo carretero en manos de ejidatarios en los libramientos Apizaco-Huamantla, Tlaxco-Tejocotal, la carretera México-Veracruz y Arco Norte, continúa al no alcanzar acuerdo con la Secretaría de Gobernación y de Comunicaciones y Transportes, por lo que campesinos no desisten en su acción de protesta que -informaron- será por tiempo indefinido.
Los inconformes comentaron que, hasta el momento, las autoridades no han valorado firmar un convenio para indemnizar a miles de campesinos de cuatro entidades a quienes les fueron expropiadas sus tierras durante el sexenio del panista Felipe Calderón Hinojosa.
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Si bien durante diversos momentos del jueves ocho de agosto en los diferentes tramos carreteros abrieron el paso a unos dos mil traileros que habían pasado dos noches y tres días en carreteras de Tlaxcala, los productores de granos volvieron a bloquear las carreteras sin importar la lluvia que se registró.
El martes, a las 11:00 horas, los campesinos sitiaron con tractores -en ambos sentidos- la carretera federal con lo que impidieron el paso a miles de vehículos y transporte de carga pesada y de productos perecederos, tales como hortalizas y ganado vacuno que tenía como destino el sur de México y la Central de Abastos de Iztapalapa.
Los camioneros estacionaron una fila doble que comenzó frente a Ciudad Judicial, en Apizaco, y terminó a la altura de la empresa Atlax, situada en el municipio de Xaloztoc, en sentido contrario los más afectados fueron camioneros con cargas de combustible de Pemex y zanahoria proveniente de Veracruz.
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Los traileros tuvieron que caminar varios kilómetros en busca de alimentos y sanitarios, servicios que encontraron en las tiendas convencionales de letras rojas, algunos vendedores ambulantes llevaron agua y refrescos hasta los transportistas.
CAOS VIAL EN CALPULALPAN
En la carretera federal México-Veracruz, donde se incorporan los vehículos procedentes de los estados de México, Hidalgo y Tlaxcala, en el municipio de Calpulalpan, durante estos días se han registrado largas filas de automotores de transporte de carga, lo que afecta al tránsito local que presenta dificultades de movilidad al comunicarse hacia las comunidades.
Debido al cierre de autopistas, el transporte de carga, autotransporte y vehículos particulares toman como vía alterna la carretera federal México-Veracruz, por lo que la circulación es lenta a la altura de la colonia Alfonso Espejel y en las vías de ferrocarril.
En el municipio fronterizo con el Estado de México no respetan los semáforos, el miércoles por la tarde elementos de la Guardia Nacional trabajaron en la vialidad en este punto de la carretera, lo que permitió un orden en la circulación, sin embargo, entrada la noche se retiraron y, hasta el momento, no hay quien ponga orden en este cruce que se ve saturado por la carga vehicular.
NO TENEMOS CÓMO AGRADECERLES: AFECTADOS
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Los ojos de quienes se han convertido en “mártires del camino” denotan cansancio después de permanecer varados durante dos noches y tres días en el libramiento poniente Apizaco-Huamantla.
Para ellos, pernoctar en la carretera se convirtió en una pesadilla; después de unas horas se agotaron sus reservas, no tienen alimentos, agua ni un lugar para hacer sus necesidades fisiológicas.
Ellos tienen las horas contadas para entregar el tonelaje de zanahorias en la Central de Abastos de Iztapalapa, solo que el combustible se les termina para mantener en refrigeración este tubérculo y ya hay riesgos de perder todo.
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Emilio Utrera y Margarito Nava son compañeros de viaje, salieron la madrugada del martes de la Ciudad de México con destino a Veracruz.
Su misión es trasladar hasta el muelle carguero del puerto para su embarque miles de libros de texto para el inicio del ciclo escolar de los niños cubanos, empero, en el oficio de trailero siempre hay una luz al final de la carretera.
Los “mártires del camino” reciben apoyo de las familias tlaxcaltecas que les llevan alimentos calientes, agua, pan, café y leche.
“No hay palabras de agradecimiento, tanta generosidad de los tlaxcaltecas, sufrimos un poco pero ya vino la ayuda humanitaria”, expresó Margarito Nava antes de reiniciar su camino una vez que los ejidatarios desbloquearan el libramiento.
Emiliano Vargas y su esposa llevaron café, leche y pan a los traileros que a las 11:30 horas de este jueves siguieron su camino. “Que los ejidatarios tomen las casetas y reciban el dinero que les adeudan, a nosotros que no nos responsabilicen de los errores que incumplió el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa”.
- El pasado martes, a las 11:00 horas, los campesinos sitiaron con tractores -en ambos sentidos- la carretera federal, con lo que impidieron el paso a miles de vehículos y transporte de carga pesada y de productos perecederos.
*Con información de Manuel Morales