Por segunda ocasión en menos de seis meses, las puertas del Congreso local, llamado la Casa del Pueblo, fueron cerradas a medios de comunicación y a los ciudadanos que acudieron a realizar algún trámite.
Sin explicar el motivo, un guardia de seguridad y la encargada de registrar los accesos, cerraron con cadena y candado la entrada lateral del Palacio Legislativo, la ubicada sobre la calle Miguel Lardizábal y Uribe.
Los ciudadanos reprobaron la determinación de impedirles el ingreso, pues tampoco les informaron el motivo del cierre y permanecieron afuera de la puerta.
Y aunque la encargada de los registros argumentó que se trataba de una orden que dio la presidenta de la Mesa Directiva del Congreso local, Luz Vera Díaz, la diputada aseguró que no fue así y que desconocía incluso sobre la restricción.
En junio pasado, los integrantes de la LXII Legislatura local también cerraron las puertas a Palacio Legislativo a los representantes de los medios de comunicación, actitud reprobada por los actuales diputados locales que aseguraron que esa situación no sería repetida.