Si bien la pandemia de Covid-19 provocó la pérdida de empleos, el cierre de negocios y la baja de salarios, lo que en teoría podría provocar que las personas incurrieran en delitos para conseguir el sustento familiar, en Tlaxcala no fue el caso, pues no se han detectado primodelincuentes.

Y es que de los que han sido detenidos, el 99 % de estos ha sido reincidente, pero que por la falta de denuncia o por delitos menores salen libres, pero vuelven a delinquir, al menos así lo muestran las cifras de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.

Ante este escenario, es de reconocer que los tlaxcaltecas que se quedaron sin trabajo no buscaron la salida fácil, pues prefirieron autoemplearse o buscar otro empleo antes de tener conductas delictivas.

Según la dependencia estatal, ninguno de los detenidos refirió que lo hacía por necesidad, además de que lo hurtado no coincidía con productos de la canasta básica o medicamentos que pudieron haber robado para cubrir necesidades de alimentos o atención médica.

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