La pandemia por Covid-19 motivó a Totkli Educación Ambiental a ir a las casas y negocios de Tlaxcala para recolectar las colillas de cigarros.Así, el pasado fin de semana, en Tlaxcala y Puebla fue llevado a cabo el Colillatón Quédate en Casa, con visitas a más de 19 voluntarios y personas que se sumaron a ese proyecto cuyo fin es concientizar a la población sobre los problemas ecológicos que generan las colillas de cigarros.
Hilda Margarita Castro Cuamatzi, de Toktli Educación Ambiental, informó que en esta ocasión recolectaron 10 kilos de colillas de cigarros, que tendrán un manejo adecuado (reciclaje) al ser residuos peligrosos, pues una sola colilla de cigarro contamina entre 8 y 10 litros de agua del mar y hasta 50 litros si se trata de agua dulce, y su ingesta puede causar la mortalidad directa de aves y cetáceos (SEO/BirdLife).
Agregó que a manera de incentivar el manejo de adecuado de las colillas de cigarros, a los voluntarios y agentes de cambio les fueron entregados 22 ceniceros portátiles y 20 macetas que sustituyen al plástico (creadas con las mismas colillas de cigarros ya recicladas), para evitar tirar las colillas al piso o en espacios públicos."Las actividades de colillatones en Tlaxcala, del cual es pionero Toktli Educación Ambiental, ha entregado a Eco filter México, para su transformación en macetas, papel y otros productos, 42 kilos de colillas, desde el primer Colillatón y hasta la fecha", dijo.
En los océanos, las colillas de cigarro son más contaminantes que los popotes, pue una sola contamina hasta 50 litros de agua potable y/o 15 litros de agua de mar, según afirmó Leopoldo Benítez González, biólogo egresado de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala, quien en 2019 agregó que los filtros son desechos tóxicos y desatendidos, que en todo México provienen de la boca de 13 millones de fumadores.
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