A partir de Covid-19, las autoridades de municipios y comunidades de Tlaxcala han optado por destinar espacios para nuevos cementerios, pues los existentes han alcanzado su máxima capacidad y, en varios casos, las tumbas son reutilizadas.
De acuerdo con la recopilación de Información de los Panteones Públicos en las Zonas Metropolitanas del País 2020 de la Secretaría de Salud, el 81.5 % de las defunciones por coronavirus ocurrió en los municipios que conforman las zonas metropolitanas más grandes de los estados y, como resultado, la saturación del servicio de panteones y cementerios.
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En el caso de la entidad, existe sobrecupo en los sepulcros de Apizaco y Tlaxcala capital. Sin embargo, el problema es común en el resto de los municipios, los pobladores ya no tienen dónde sepultar a sus familiares caídos y deciden reutilizar las tumbas viejas.
Por ejemplo, el ayuntamiento de Tlaltelulco, que encabezó el alcalde Rubén Pluma Morales, adquirió un predio para el nuevo proyecto del panteón ubicado sobre la calle Josefa Ortiz de Domínguez de la colonia Satélite.
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El espacio tiene una extensión superior a la media hectárea (más de cinco mil metros cuadrados) y cumple con todas las características para su funcionamiento a corto y largo plazo, además de que invirtió un millón 300 mil pesos.
En Nanacamilpa, el exalcalde Víctor Hugo Sánchez Flores adquirió un predio de dos hectáreas para la instalación del nuevo panteón, cuya capacidad será de tres mil tumbas, pues los dos anteriores llegaron a su máxima capacidad.
En su momento, detalló que esta obra requirió una inversión superior a los 1.5 millones de pesos, recurso gestionado por la diputada local, Luz Vera Díaz, del Fondo de Resarcimiento a las Finanzas Municipales de Tlaxcala.
Para la primera etapa, estaba contemplado el bardado de la periferia, la construcción de una zona de descanso con estacionamiento y servicio de sanitarios.
Mientras que en Chiautempan, durante el mandato de Héctor Domínguez Rugerio, fue construido el nuevo camposanto municipal denominado “San Nicolás”, ubicado en la calle 5 de Febrero, de la comunidad de San Pedro Muñoztla. El predio comprende un poco más de 17 mil metros cuadrados.
Otro nuevo está en la comunidad de San Bartolomé Matlalohcan, municipio de Tetla de la Solidaridad, donde apenas en la administración pasada dotaron de una barda perimetral, pues en el anterior ya no cabe un cuerpo más.
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En 2020, por ejemplo, una comisión de habitantes de San Mateo Ayecac, municipio de Tepetitla pidió al entonces alcalde Carlos Fernández Nieves clausurara el panteón de ese lugar, pues ya no tiene capacidad de albergar a más difuntos y aun así siguen apilando cuerpos.
De hecho, ha trabajado para recaudar fondos para la compra de un predio, el cual prevén tenga un costo aproximado de 1.3 millones de pesos.
El expresidente de comunidad, David Contreras Enríquez, asevera que desde 2002 detectó la problemática, pero no hubo resonancia entre la población y el problema agravó.
En Santa Cruz Tlaxcala también existe un nuevo panteón ubicado en el barrio El Alto, sobre la calle Nicolás Bravo, el cual recibió de la anterior administración una nueva fachada y la barda perimetral.
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En Zacatelco, el nuevo camposanto está ubicado en Camino Real y Barranca Seca, de la Sección Primera, cuya área es de 10 mil 810.62 metros cuadrados, pero el proyecto no avanzó por problemas jurídicos, toda vez que quedó como garantía para el pago de laudos laborales.
El proyecto abarcaba una capilla, pasillos, corredores, baños públicos, oficinas, áreas de cripta con gavetas, área de osario, así como un columbario para depositar urnas.
En Totolac sucedió lo mismo, el cementerio ya no tiene capacidad para albergar nuevos cuerpos, por lo que el exalcalde Giovanni Pérez Briones inició los trámites y trabajos para la construcción de uno nuevo.
No obstante, un grupo de vecinos logró la cancelación de una obra pública, con el argumento de que se ejecutaba en una zona natural de un cerro ubicado en aquel municipio.
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Así, la constante es que los anteriores cementerios ya no tienen capacidad para albergar a nuevos cuerpos inertes, por lo que la ciudadanía demanda la edificación de nuevos espacios que procuren la cristiana sepultura de los familiares y parientes fallecidos.
- 3,000 tumbas será la capacidad del nuevo panteón de Nanacamilpa, cuyo predio fue adquirido por el exalcalde Víctor Hugo Sánchez Flores.
- 1.3 millones de pesos invirtió el ayuntamiento de Tlaltelulco que encabezó el alcalde Rubén Pluma Morales, para adquirir un predio para el nuevo proyecto del panteón.
SOBRECUPO Existe sobrecupo en los sepulcros de Apizaco y Tlaxcala capital. Sin embargo, el problema es común en el resto de los municipios, los pobladores ya no tienen dónde supultar a sus familiares caídos y deciden reutilizar las tumbas viejas.
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