Quiere "trans" hacer historia en Tlaxcala

Valeria Lorety se registró como candidata del PVEM a la presidencia municipal de Zacatelco

Karla Muñetón | El Sol de Tlaxcala

  · lunes 26 de abril de 2021

Valeria Lorety Díaz es la primer mujer trans que busca convertirse en presidenta municipal de Zacatelco/ Karla Muñetón | El Sol de Tlaxcala

Valeria Lorety Díaz, la primera mujer trans que busca convertirse en presidenta municipal en la entidad, quiere hacer historia y demostrar la calidad de seres humanos que son quienes forman parte de la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Transexual, Travesti e Intersexual (LGBTTTIQ+).

A sus 35 años, pretende ser el ejemplo para hombres y mujeres de que la perseverancia consolida triunfos y cumple sueños, a pesar de las caídas y de los tropiezos que enfrenten.

Es estilista y actualmente tiene una escuela en Zacatelco, pero convertiste en empresaria significó muchos años de luchar contra todo tipo de discriminación, inicialmente en el seno de su familia.

Valeria Lorety Díaz es la primer mujer trans que busca convertirse en presidenta municipal de Zacatelco/ Karla Muñetón | El Sol de Tlaxcala

Y aunque se siente emocionada de tener una escuela de estilismo profesional, le es más satisfactorio el poder generar empleos directos y de esa forma dar oportunidad a la gente que quiere desempeñarse en la vida laboral.

Por eso, su filosofía de vida es que si “tú compartes tus conocimientos se abren nuevas puertas”.

Recientemente se registró ante el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones como candidata del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) a presidenta municipal de Zacatelco, y su intención es la consolidación de un proyecto en pro de la sociedad que “estoy segura dejará un buen sabor de boca”.

En entrevista con El Sol de Tlaxcala, destacó la importancia del actual proceso electoral, pues dijo que promover la inclusión y el respeto de la comunidad LGBTTTIQ+ hará que a partir de este año las elecciones no sean las mismas.

“Estamos levantando la mano y le estamos abriendo brecha a las nuevas generaciones, y eso es algo que sin duda va a impactar no solo a nivel local, sino también a nivel estatal porque mi nombre tendrá historia muy próximamente”, expresó.

“LLEGAR NO HA SIDO FÁCIL”

Sin embargo, posicionarse en el sitio en donde ahorita está no fue fácil ya que enfrentó muchos obstáculos que, considera, la hicieron ser la mujer que hoy es.

Valeria Lorety nació en el municipio de Huamantla y permaneció allí hasta los 17 años, cuando por sus preferencias sexuales fue discriminada por su familia y decidió salirse de su casa para irse a Tijuana, en donde durante cinco meses vivió bajo un túnel y sobrevivió de la venta de fierro viejo.

Cuando sus papás la buscaron regresó con ellos a Huamantla para estudiar la carrera de medicina en la Universidad Autónoma de Tlaxcala pero la abandonó unos meses después ya que era muy largo el trayecto que hacía desde su casa hasta Guardia, Zacatelco, donde está la facultad de la máxima casa de estudios.

Además, contó que aunque sus papás aceptaron sus preferencias sexuales, en su casa seguía existiendo la discriminación hacia ella, por lo que tiempo después, a los 20 años de edad, decidió formalizar la relación con su pareja e irse a vivir con él a Chiautempan.

Narró que antes de lograr la apariencia física que actualmente tiene, vivió todo tipo de discriminación y burlas en prácticamente todos los ámbitos de su vida.

Explicó que hace 18 años la ciudadanía no aceptaba la diversidad sexual como ahora, y le tocó vivir un proceso muy complicado pues físicamente la gente veía en ella un varón, pero de forma interna ella tenía el pensamiento de una mujer.

Dijo que el rechazo de su familia se sumó al de la sociedad, como por ejemplo al momento de solicitar servicios médicos o cuando buscó incorporarse al ámbito laboral, pues en una ocasión tajantemente le cerraron las puertas en una fábrica donde solicitó ser empleada.

EL CAMBIO FÍSICO

Valeria Lorety contó que hace aproximadamente cinco años legalmente cambió su identidad para adoptar su nombre actual.

Empero, expuso que sus cambios físicos iniciaron hace unos15 años, cuando con el apoyo de su entonces pareja sentimental decidió empezar con el reemplazo hormonal para aumentar la progesterona y físicamente verse más femenina.

Y fue también en ese momento cuando asumió el reto de vestirse de mujer, pues tenía claro que debía elegir la esencia de su imagen. Refirió que en ese proceso retomó sus estudios y eligió la carrera de estilismo. Tiempo después fue invitada por un amigo para trabajar con él en una estética en Zacatelco.

“Yo siempre tuve claro que debía ofrecer (en la estética) un servicio de calidad y eso iba a ser a través del buen desempeño de mi trabajo, la profesionalización y la actualización...ya tenemos 14 años en Zacatelco y creo que hemos hecho un buen trabajo”, opinó.

Señaló que fue hace aproximadamente un año cuando decidió incursionar en la academia, al iniciar con el proyecto de la escuela de estilismo profesional en el municipio de Zacatelco.

Y si bien se trata de un negocio y la consolidación de un proyecto personal, comentó que le ha permitido dar trabajo a más personas, ya que ahí laboran nueve profesores, personal que les ayuda en la estética y de recepción.

“Y entonces Valeria ha generado un panorama no solamente en beneficio de ella, sino de otras personas”, expresó.

LLAMA A NO DISCRIMINAR

Todas las complicaciones que Valeria ha enfrentado le han permitido llegar a donde actualmente está y hacerla crecer como mujer y como persona.

Sostuvo que cada cosa que tiene le ha costado mucho trabajo y sacrificio en carne propia y que por eso lo valora, porque cuando las cosas se hacen con sacrificio propio es cuando se aprecian.

Por otro lado, llamó a la sociedad a no discriminar y a ser incluyente sin importar la edad, la religión o la preferencia sexual, pues ella es ejemplo de que lo importante es la calidad de la persona, sus valores, sus cualidades y sus aptitudes.

“Nosotros (de la comunidad LGBTTTIQ+) tenemos algo que no lo compramos y que nos ha costado mucho, la honestidad y la transparencia, y somos así porque estamos mostrando un concepto completamente firme, porque los títulos académicos o universitarios no te hacen más o menos persona”, finalizó,

VALERIA

  • A sus 35 años, pretende ser el ejemplo para hombres y mujeres de que la perseverancia consolida triunfos y cumple sueños, a pesar de las caídas y de los tropiezos que enfrenten.

La candidata llamó a la sociedad a no discriminar y a ser incluyente sin importar la edad, la religión o la preferencia sexual, pues ella es ejemplo de que lo importante es la calidad de la persona, sus valores, sus cualidades y sus aptitudes.

Nosotros (de la comunidad LGBTTTIQ+) tenemos algo que no lo compramos y que nos ha costado mucho, la honestidad y la transparencia

VALERIA LORETY / CANDIDATA

Continúa leyendo: