Con el propósito de seguir honrando la memoria del profesor Candelario Nava Jiménez y como un reconocimiento a sus múltiples méritos en la docencia en el estado, la primera generación de la Escuela Normal Urbana “Ignacio Manuel Altamirano” (1960-1962) ofrendó una corona de flores al monumento de este emblemático personaje ubicado en el Bulevar del Maestro, en la colonia Loma Xicohténcatl, municipio de Tlaxcala.
En este acto, recalcaron que el profesor Candelario Nava fue un pionero de la educación en Tlaxcala, y que su lucha por defender los derechos de los docentes es reconocida por generaciones de maestros que él formó en su tiempo.
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El profesor José Saturnino Guadalupe Rugerio Saldaña, en su discurso, pidió que las nuevas generaciones sepan quién fue Candelario Nava y que nunca olviden su legado, que, así como ahora esta generación y pionera de la Normal Urbana “Ignacio Manuel Altamirano” lo recuerda, los nuevos profesores lo admiren también.
Por otro lado, mencionaron que Nava Jiménez realizó sus estudios en la Escuela Normal para maestros en la Ciudad de México. Inició sus actividades profesionales en 1923 en Zacatecas.
Recordaron que fue originario de Santa María Ixtulco, municipio de Tlaxcala, y que dedicó su vida profesional a la educación; presentó sus servicios profesionales en varios estados de la República, con una clara inclinación por la actividad deportiva, además fue uno de los impulsores de los juegos deportivos de la Revolución.
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Resaltaron que en 1924 fue ayudante de la escuela Tipo a Culiacán, en donde inició la práctica del voleibol y basquetbol, para responder a la Reforma Educativa promovida por el entonces secretario de Educación Pública, José Vasconcelos, quien le dio oportunidad de realizar el encuentro atlético escolar, lo que le hizo acreedor al nombramiento de maestro de Educación Física.
Mencionaron que en 1929 tuvo problemas de salud, le detectaron paludismo, lo que lo obligó a pedir licencia como docente y regresar a Tlaxcala. Poco después lo nombraron director técnico de las escuelas estatales y más tarde volvió a salir del estado para irse a Querétaro y después a Guanajuato, donde promovió un programa deportivo atlético que se celebra cada 20 de noviembre.
En 1954 creó la Escuela Secundaria Vespertina y en 1960 la Escuela Normal en el seno de la institución anterior, donde también fue director hasta octubre de 1972.
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Por último, expresaron que, con esta lucha social por los derechos de los profesores, se convirtió en maestro de Historia Universal en la secundaria y preparatoria del estado, y en 1955 en Psicología; en marzo de 1976 fundó la Escuela Normal Superior de Tlaxcala. Después de su retiro, falleció el 11 de octubre de 1991.
En esta convivencia estuvo la familia del profesor Candelario Nava Jiménez y exalumnos de la segunda y tercera generación de la Normal Urbana “Ignacio Manuel Altamirano”, quienes con un minuto de aplausos recordaron a su ser querido y maestro de maestros.