El refrigerio escolar, comúnmente llamado “lunch”, es parte indispensable para el desarrollo de los estudiantes. Debe ser balanceado para que aporte nutrientes y vitaminas, lo que aminorará el riesgo de las enfermedades crónicas, aseveró Angelica María Tela Berruecos, nutrióloga de la Secretaría de Salud de Tlaxcala.
El refrigerio ha sufrido diversas modificaciones con el paso de los años, pues hace varias décadas era más saludable por no incluir los embutidos, endulzantes y jugos artificiales, recordó la nutrióloga.
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Actualmente, por el tiempo limitado y buscar lo más práctico, los padres de familia optan por enviar un sándwich o una torta para que sus hijos la consuman durante el receso escolar, que es entre las 10:00 y 11:00 horas.
A propósito del Día Mundial del Sándwich, instituido cada tres de noviembre para conmemorar a este variado y práctico platillo, existen maneras de hacer este alimento sano y nutritivo.
La especialista en nutrición mencionó que un refrigerio escolar ideal está integrado por agua natural, frutas, verduras, cereales y proteínas, como lo determina el programa del Plato del Buen Comer.
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Con el agua natural garantizamos la adecuada hidratación de los infantes, pero muchos no consumen el agua 'sola', entonces recomendamos que preparen los líquidos con fruta natural de temporada, como naranja, mandarina o guayaba, que les aportarán vitamina C y ayudarán al sistema inmunológico.
Además, recomendó colocar en la lonchera un huevo hervido para cubrir el consumo de proteína, para la verdura puede ser brócoli, chayote, pepino o zanahoria al vapor, también pueden incluir queso o frijoles refritos y lo pueden acompañar con galletas o pan, preferentemente integral para cubrir el aporte de cereal.
Reconoció que muchas familias no tienen el recurso necesario para comprar pan integral, que tiene un costo más elevado, de ahí que aconsejó mandar una tortilla o medio bolillo.
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SÁNDWICH, UN ALIMENTO PRÁCTICO
Por la rapidez, practicidad y el tiempo limitado, muchos padres de familia optan por enviar una torta o un sándwich de jamón para alimentar a sus hijos durante el receso escolar, por eso, la comunidad escolar es uno de los principales consumidores de este platillo.
Un sándwich o una torta también es fácil de preparar y mantiene sus propiedades por algunas horas. Además, el producto es fácil de encontrar en cooperativas escolares y establecimientos cercanos a las instituciones educativas, quienes ofertan el sándwich de jamón a un costo de 12 a 20 pesos, pero en los restaurantes y cafeterías el precio incrementa hasta los 80 a 120 pesos, debido a que va acompañado con papas e ingredientes que elevan su valor.
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El sándwich de jamón es el más común, pero existen de pechuga de pollo, jamón serrano y otros embutidos, también lo componen con lechuga, jitomate, mayonesa, frijoles y algún picante.
Según los expertos, este alimento elaborado con dos rebanadas de pan integral, jamón y lechuga contiene alrededor de 220 calorías, pero al agregarle mayonesa el aumento calórico es hasta del 40 %.
La especialista dijo que este alimento puede ser nutritivo, aconsejó sustituir la mayonesa por aguacate, que contiene grasa saludable que favorece a desarrollar la inteligencia del menor y lo protege de enfermedades cardiovasculares porque brinda Omega 3, 6 y 9; así como agregar lechuga orejona, jitomate y frijoles.
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Aconsejó a los padres de familia darse un tiempo para preparar los alimentos de sus hijos, hacerlos atractivos y optar por productos saludables.
Recomendó no enviar el refrigerio en una bolsa de plástico y optar por una lonchera o recipiente, pues conservará mejor sus propiedades y disminuirán el cambio de temperaturas durante el trayecto.
Acotó que los alimentos pueden sufrir alteraciones cuando el infante olvida consumirlo durante el receso, entonces podrían incrementar las posibilidades de descomposición.
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ALIMENTOS QUE DEBEN EVITAR EN EL REFRIGERIO
La nutrióloga compartió que los padres de familia deben evitar los endulzantes artificiales, refrescos y jugos envasados para evitar que el paladar del infante se acostumbre a esos sabores.
Explicó que no aconseja el consumo de refrescos y jugos artificiales por el alto contenido en azúcar refinada y sodio, que a la larga propiciará enfermedades como sobrepeso y obesidad infantil, pero seguir con los malos hábitos de alimentación también desencadenarán enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, colesterol o triglicéridos elevados.
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La leche, quesos, jamón, queso de puerco y otros embutidos son productos sensibles y deben contar con adecuada fecha de caducidad, de lo contrario podrían causar algún malestar o intoxicación, alertó.
PARA SABER
- Un refrigerio escolar ideal está integrado por agua natural, frutas, verduras, cereales y proteínas, como lo determina el programa del Plato del Buen Comer
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- Más de 200 calorías puede contener un sándwich de jamón, pero la ingesta calórica puede incrementar hasta en un 40 % al agregar mayonesa.
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