Las ventas comerciales de los establecimientos que están instalados alrededor del antiguo Hospital General de Tlaxcala se desplomaron durante este mes de marzo, luego del traslado del nosocomio a la zona de hospitales en el municipio de Apetatitlán. Mientras que los locales semifijos cerraron definitivamente sus puertas y los vendedores ambulantes dejaron de ir.
Tras 77 años de servicio el Hospital General de Tlaxcala “Doctor Miguel Lima Ramírez” cerró sus puertas, después de resistir daños por temblores y deterioro en su infraestructura por el paso del tiempo. Actualmente, las instalaciones están cerradas y custodiadas por personal de seguridad; por fuera lucen en desperfecto.
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En un recorrido realizado por este Diario, se comprobó que las casetas de los vendedores de comida están abandonadas frente a la entrada principal del hospital, prácticamente no hay comercios ambulantes, tan solo un vendedor de tamales en la esquina de la Calle Miguel Hidalgo.
Así, las calles Josefa Castelar, Diego Muñoz Camargo y Miguel Hidalgo y Costilla lucen con una baja actividad comercial y de tránsito de personas por la zona.
Los comercios como farmacias, funerarias, lavanderías, de aparatos ortopédicos, torterías están abiertos, pero ya no con horarios extendidos como antes, porque descendieron las ventas, coincidieron los locatarios, quienes agregaron que en algunos casos abren de forma intermitente, después de las 10 de la mañana, cierran en ratos, o bien, hasta que les toque el timbre algún cliente.
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Francisco Luna, dueño de una funeraria, señaló que prácticamente las ventas se desplomaron 90 %, luego de que trasladaron los servicios médicos del antiguo hospital a Apetatitlán.
Aceptando dialogar con El Sol de Tlaxcala, admitió que se mantiene a flote porque tiene 30 años trabajando en el ramo de la funeraria, tiene clientes, quienes lo recomiendan para tener ventas.
“Las ventas bajaron casi al 90 %, porque realmente nos afectó mucho el traslado del hospital, pero hay que aguardar, no queda de otra. La gente llega sola a veces, pero no es lo mismo con la actividad que había con el hospital. Los puestos de enfrente todos cerraron, una farmacia cerró, otro compañero funerario también cerró, afecta demasiado”.
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María N., empleada de una farmacia, dijo escueta que mantienen con normalidad su horario de atención al público de la zona.
“Vendemos material de curación y los servicios de farmacia, pero sí se han visto afectadas las ventas, ya no hay muchos clientes”.
Por su parte, una dueña de una tortería, dijo que tiene abierto porque es su local, no paga renta y puede manejar el horario que mejor le convenga. “Antes las ventas eran buenas, pero es mi local, es la ventaja, no pierdo”.
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Mientras, una responsable de una tienda de abarrotes comentó que la actividad comercial es baja, a pesar de que hay otras oficinas, incluyendo a la dependencia de la Secretaría del Bienestar.
Digamos que nos compran los pocos vecinos de la zona, de las oficinas. Antes todo el tiempo había gente alrededor del hospital. La gente venía a comprar agua, refrescos, algunas botanas, artículos de higiene para sus pacientes
En tanto, los consultorios médicos privados que están al lado del antiguo Hospital General de Tlaxcala están con sus actividades normales en atención a sus usuarios.
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- 77 años estuvo activo el Hospital General de Tlaxcala “Doctor Miguel Lima Ramírez”. Cerró sus puertas después de resistir daños por temblores y deterioro en su infraestructura por el paso del tiempo.