La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó irregularidades al gasto que la pasada Legislatura local hizo durante el ejercicio fiscal 2020 por un monto de 11 millones 426 mil 543.18 pesos.
Por eso, la ASF pidió al Congreso local proporcionar la documentación adicional justificativa y comprobatoria del dinero por concepto de incremento de la asignación global destinada al rubro de servicios personales respecto del límite máximo permitido, y que fue determinado de acuerdo con el cálculo establecido en la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios.
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Además, el informe establece dos promociones de responsabilidad administrativa sancionatoria, una solicita al Comité de Administración investigar y hasta iniciar el procedimiento administrativo en contra de quienes no incluyeron en el Anteproyecto de Presupuesto de Egresos 2020 los formatos de proyecciones de ingresos y egresos de acuerdo con los Criterios Generales de Política Económica.
Y la segunda para que inicie el procedimiento administrativo correspondiente por las supuestas irregularidades de los servidores públicos que, en su gestión, asignaron recursos para el capítulo 1000 llamado “Servicios Personales” en el Presupuesto de Egresos del Congreso local para el ejercicio fiscal 2020, por un monto superior al límite establecido en la normativa.
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El informe señala que el Poder Legislativo presuntamente infringió la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios y la Ley General de Contabilidad Gubernamental, pues al parecer incrementó la asignación de recursos para servicios personales durante el ejercicio fiscal 2020 por nueve 275.1 pesos.
Asimismo, que presuntamente aumentó la asignación global destinada a servicios personales respecto del límite máximo, lo que generó un monto pendiente por aclarar por 11 millones 426 mil pesos.
Al parecer, el Congreso incrementó la asignación de recursos para servicios personales durante el ejercicio fiscal 2020 por nueve 275.1 pesos.
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