Todavía no hay fecha para que concluyan las reparaciones de la parroquia de San José, ubicada en la capital tlaxcalteca, pues la humedad en las grietas complicó su restauración, dijo el vicario y encargado de ese templo, Marco Antonio Padilla Aguilar.
En entrevista, comentó que los especialistas restauradores del Instituto Nacional de Antropología e Historia avanzan lentamente pues, el trabajo que realizan es minucioso, además la estructura se vio severamente dañada con el temblor de 2017.
“Desde hace mucho tiempo, no se le daba mantenimiento al templo, por lo que tenía bastante humedad, cuando vino el temblor se vio sumamente dañado, pues estaba muy débil y le provocó grietas muy grandes, a la fecha, los especialistas trabajan de manera artesanal, por eso van despacio”, insistió.
De hecho, aseguró que ha atestiguado que abren las grietas y retiran todo lo que presenta daños, que es como arenilla y nuevamente lo rellenan de manera artesanal, lo cual retarda las operaciones.
“A simple vista pensábamos que era muy rápido, pero cuando se empezaron a abrir las grietas nos dimos cuenta que si era necesario ponerle más atención, además quisimos aprovechar los trabajos y no quede alguna grieta que después genere otra vez humedad”, puntualizó.
En este sentido, Padilla Aguilar detalló que la torre también ha recibido atención escrupulosa y le volverán a colocar talavera, su linternilla y la cruz que originalmente tenía, con el objetivo de que no pierda la fachada original, pero con estructura reforzada.
“No nos han dado fecha para que culminen los trabajos, así que espero que los recursos alcancen porque el que está subsidiando este proyecto es el Fondo para la Atención de Emergencias, aunque debemos aclarar que ese recurso no va a atender la estética interior del templo”, sentenció.
Finalmente, precisó que San José requiere del cambio de luminarias, red eléctrica y la pintura, pues por el paso del tiempo y su no utilización, han quedado obsoletos, por lo que será la parroquia y la propia feligresía quienes financien esos gastos.
De acuerdo con el párroco, “el Consejo Parroquial ha tocado algunas puertas para hacer gestiones y atender las necesidades de energía eléctrica, pero no es posible avanzar porque los especialistas siguen trabajando en la estructura, una vez que quede listo, nosotros podremos operar en la parte interna”.
Continúa leyendo: