Tiene Tlaxcala 13 casos de viruela del mono

De los tres mil 956 casos de viruela del mono registrados a nivel nacional, Tlaxcala acumula 13.

Local

Aplican en Tlaxcala vacuna antirrábica para perros y gatos

Han transcurrido 10 meses desde que México tuvo el primer caso de la también llamada viruela símica y más de siete desde que sucedió lo mismo en Tlaxcala.

Más detalles: ➡️ Origen de la viruela: sus primeros indicios hasta la nueva ‘viruela del mono’

A inicios de diciembre del año pasado Tlaxcala tenía ocho casos confirmados, todos ellos con asilamiento en su casa y que no requirieron de hospitalización.

Local

Llaman a mantener higiene para evitar la viruela símica

En enero la cifra se elevó a 10 al registrar dos contagios nuevos en ese mes, y al momento registra 13 casos activos, eso con corte al tres de abril.

De acuerdo con el Informe Técnico Quincenal De Vigilancia Epidemiológica de Mpox (antes llamada viruela símica) de la Secretaria de Salud federal, todos los contagios activos de Tlaxcala han sido ambulatorios, que significa que no necesitaron hospitalizaciones, y no hay muertes por ello.

➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo

Esos 13 contagios reflejan que Tlaxcala tiene una incidencia del 0.91 casos por cada 100 mil habitantes, mientras que a nivel nacional es de 3.01 por el mismo número de pobladores.

A nivel nacional Tlaxcala es una de las 11 entidades que tienen menos de 15 casos de la llamada viruela del mono: Durango, Sonora, Michoacán, Zacatecas, Oaxaca, Guerrero, San Luis Potosí, Baja California Sur, Nayarit y Colima.

RECOMENDACIONES

Local

Desde el Sector Salud, refuerzan la prevención de viruela símica

No dejes de leer: ➡️ Sesa en Tlaxcala capacita ante posibles casos de viruela símica

La viruela símica es una enfermedad que se caracteriza por erupción o lesiones cutáneas que suelen concentrarse en la cara, las palmas de las manos y las plantas de los pies.

Al ser una enfermedad viral, las recomendaciones para evitar contagios son el lavado de manos de forma frecuente, con agua y jabón; cubrir nariz y boca al estornudar o toser; evitar compartir alimentos, bebidas, cubiertos y platos; usar cubrebocas; limpiar y desinfectar los espacios y objetos de una persona enferma y no tocar las lesiones.

Las personas que tienen la enfermedad son contagiosas mientras tienen síntomas (normalmente entre las primeras dos y cuatro semanas), y también puede haber contagios con el contacto con lesiones dérmicas, líquidos corporales, gotículas respiratorias y objetos contaminados.