En la 23 Zona Militar, existen dos perros, aunque en la entidad son seis los que están distribuidos en bases militares estratégicas, entrenados para detectar todo tipo de drogas.
Luna y Thor 23 son los nombres de los animales que demostraron sus habilidades y destrezas logradas durante sus entrenamientos, por parte del personal militar capacitado.
Los perros adiestrados esperaron instrucción pacientemente a un lado de su entrenador, pues frente a ellos había cinco obstáculos y la misma cantidad de cajas que contenían señuelos con olores similares a enervantes.
El sargento segundo del Arma Blindada, Ernesto Antonio Santillán Domínguez, explicó que en Tlaxcala las unidades caninas se especializan en detección de enervantes y explosivos.
En la mesa, exhibieron todo tipo de indumentos para el ejercicio, como collares, pecheras comunes y tácticas, bosales de choque, correas de operación y material para asistencia médica de los animales.
El elemento perteneciente al Segundo Regimiento Mecanizado, detalló que para el adiestramiento se requieren de dos figuras, la del entrenador y la del manejador, quienes deben mantener una estrecha relación con el animal para lograr su confianza y madurez.
CANES DE SELECCIÓN
Los elementos que prestan sus servicios, son provenientes del Centro de Producción Canina que se encuentra en San Miguel Jagüeyes, Estado de México, donde reciben un proceso de selección y socialización, en los primeros meses de vida.
Al año y dos meses, cuando dejan la etapa de infancia hacia la madurez, son enviados a los cuarteles militares y ahí inicia su proceso de formación, junto con el elemento humano, donde forman un binomio, que como en todas las áreas de la milicia, funciona a base de disciplina.
La raza de los elementos es Pastor Belga, quienes tienen un alto rendimiento y agilidad, además de un olfato desarrollado, propio para trabajar en coordinación con la milicia.
NO EXPONEN SALUD DEL CAN
Un perro que detecta enervantes es entrenado con un aroma similar al de la droga, que es envuelto en una toalla, con la finalidad de que encuentre el objetivo, además de que lo premian cuando lo logra.
“El entrenamiento para el perro es siempre un juego, buscamos que nunca entre en contacto con la verdadera sustancia o la droga, para cuidar su salud e integridad, así que es falso que los droguemos”, declaró.
De acuerdo con el adiestramiento, pueden detectar heroína, cocaína y marihuana y recientemente los están socializando con el olor a fentanilo, que es una droga muy agresiva para quien la consume.
LA JUBILACIÓN
Los canes pueden jubilarse a los diez años, pero debido a su alimentación con productos Premium, han alcanzado a prestar servicio hasta los 12 años y, posterior a ello, la comandancia los toman a mando, para cuidarlos hasta que dejen de existir por edad o si presenta algún tipo de enfermedad que le produzca dolor, les brindan una muerte humanitaria.
Finalmente, en la demostración ambos canes acertaron en la detección de las falsas drogas y saltaron obstáculos cada vez más altos.
- En la 23 Zona Militar tienen seis elementos caninos, cuya especialidad son: dos para la detección de explosivos y cuatro de enervantes.
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