La majestuosidad y colorido en el trabajo artesanal de arte efímero causaron este 14 de agosto la admiración de varios miles de personas que arribaron a Huamantla para vivir una vez más y como desde hace décadas La Noche que Nadie Duerme.
Familias completas de diferentes puntos de Tlaxcala, así como turistas de diversas entidades del país y hasta del extranjero recorrieron interminables calles adornadas con tapetes de aserrín multicolor con figuras únicas y cada vez más complejas.
Se estima que para este año ya suman ocho kilómetros de calles que son adornadas para el paso de la Virgen de la Caridad, venerada imagen de María que en su advocación de Nuestra Señora de la Asunción festeja este día su fiesta patronal.
A diferencia de otros años, en este 2019 la lluvia no se hizo presente y la temperatura fue agradable, lo que generó que los artistas huamantlecos (aprendices y expertos) tuvieran la oportunidad de expresar en todo su esplendor su admirable talento.
La variada gastronomía y la arraigada tauromaquia complementaron los atractivos para los asistentes, además de un concierto por parte de la Big Band de Tlaxcala y el recorrido cultural de los museos.
Si bien los tapetes y alfombras de Huamantla conservan su esencia al ser usado aserrín, arenillas y flores para su elaboración, resalta que las figuras cada vez son más complejas y, en algunos casos, con imágenes geométricas y tridimensionales.
Algunos visitantes no solo se dedicaron a recorrer las calles, pues varios improvisados se sumaron por instantes a la confección de los tapetes de aserrín de los hábiles artesanos locales y se tomaron la foto para compartirla en sus redes sociales.
Hombres y mujeres adultos, apoyados por jóvenes y niños del Pueblo Mágico, colaboraron en comisiones desde tres meses de antelación para La Noche que Nadie Duerme, en principio con reuniones vecinales y colecta de dinero que aportan los colaboradores para costear cada tapete por calle, además para elegir el diseño a usar en este año, elaborar los moldes a base de cartón y madera, aunado a teñir el aserrín y arenilla con anilina, colorante en polvo y sal.
Al menos seis colores distintos se usaron para la confección de arte efímero, tapetes complementados en algunos casos por adornos florales colgados desde desde las azoteas, así como iluminación y pirotecnia.
El Obispo Julio César Salcedo Aquino encabezó la procesión de la Virgen de la Caridad, que inició pasadas las 01:00 horas de este 15 de agosto, acompañado del Párroco de Huamantla, algunos seminaristas y grupos de laicos organizados para abrir paso a un carruaje adornado con un enorme cáliz, flores y al centro la imagen de la Virgen María que, como lo marca la tradición, lució un vestido nuevo a base de seda e hilos finos.
Este jueves, la fiesta en honor a Nuestra Señora de la Asunción continúan con misas cada hora desde las siete de la mañana, mientras que al mediodía será la misa principal de fiesta patronal, ceremonias a las que acuden miles de personas, algunas de ellas integrantes de peregrinaciones que viajan varios kilómetros en bicicleta, a pie o a caballo para llevarle sus oraciones y agradecimientos por la salud y favores recibidos.
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