Inmersa entre altos árboles de trueno y pino como si fueran guardianes silenciosos, se encuentra la iglesia de La Candelaria, ubicada en la comunidad de Teotlalpan, municipio de Totolac, con dos siglos de historia.
No hay un origen claro de la fecha en la que empezó la construcción del inmueble; sin embargo, el actual fiscal del templo, Óscar Sarmiento Rojas, sostiene que hay algunos archivos históricos que indican que fue en el año 1690 cuando se empezó a trabajar en la edificación.
El inmueble se ubica en la zona céntrica de una localidad rural, que abrió sus puertas por primera ocasión en 1792, uno de los tantos Rincones Sagrados de Tlaxcala, que está lleno de historia, cultura y tradición.
En el presbiterio de tipo neoclásico están cuidadosamente colocadas las imágenes de la Virgen de La Candelaria y el Santo Niño, al interior de un nicho de cristal flanqueada por dos columnas y un óleo poco visible sobre la Virgen de la Purísima. La misma toponimia de Teotlalpan se traduce en la religiosidad, la palabra proviene del náhuatl cuya etimología significa Teotl: divinidad y Tlalli: tierra pan o lugar que se traduce en “lugar de tierras consagradas” o “sobre la tierra sagrada”.
LA CANDELARIA, LA IMAGEN VENERADA
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En este templo de dimensiones no tan grandes se venera a la Virgen de la Candelaria, que, de acuerdo con información detallada por el historiador Moisés Morales Suárez, la imagen adorada es aquella que hizo su primera aparición en Tenerife, España, y cuyo culto es tan extenso que abarca hasta Las Filipinas.
El historiador sostiene que en toda América y en México el reconocimiento a la Virgen de la Candelaria permanece en el consciente colectivo y ha quedado en el recuerdo de que es “el día de los tamales”, de quienes sacan la figura del Niño Dios en la rosca de Reyes.
En la mezcla de dos culturas, La Candelaria quiere decir “la que ilumina el camino de la fe”, sostiene el historiador Moisés Morales, quien recordó que el 2 de febrero al templo arriban los comuneros con la imagen del Niño Dios que llevaron a la “acostadita” que celebraron en las tradicionales posadas previas a la Navidad.
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Otras de las tradiciones que se han forjado en la comunidad es que en el mes de mayo se acostumbra ofrecer flores a la Virgen, generalmente de las abundantes que hay en la región que son las denominadas “azules”.
TIERRA DE AMPLIA RELIGIOSIDAD
De acuerdo con el Fiscal de la iglesia de La Candelaria Teotlalpan, Óscar Sarmiento Rojas, la comunidad ha demostrado su amplio arraigo religioso, por eso destacan el origen del obispo Merlo de la Fuente Xicohténcatl, que nació en 1599 y fue ordenado en 1648 por el arzobispo Juan de Palafox y Mendoza de Tlaxcala-Puebla, para posteriormente irse a gobernar al obispado de Camagüey Antigua República de Honduras.
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Tal es el orgullo que la comunidad siente por el religioso oriundo de Teotlalpan, Totolac, que al interior del templo religioso existe un retrato de aproximadamente dos por un metro de Juan Antonio Merlo de la Fuente Xicoténcatl.
Información proporcionada por Moisés Morales Suárez contempla que el retrato fue pintado en 1760 por un autor desconocido, desde el punto de vista iconográfico el retrato es notable por la técnica depurada.
Además, a la entrada de la sacristía del templo religioso existe otro óleo en miniatura con la representación del obispo Merlo de la Fuente y exvotos (figurillas que son ofrendadas por los creyentes) sobre los milagros de la Virgen de la Candelaria, ocurridos entre los siglos XVIII y XIX.
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DESTACADA ARQUITECTURA
La arquitectura del templo religioso es de reconocerse por su estilo barroco y el arco de la portada que es de medio punto, la entrada se encuentra flanqueada por dos columnas con figuras en relieve, el portón de madera consta de dos hojas con clavos de bronce y en el segundo piso se puede observar ventana del coro.
La cúpula es de tipo octogonal, tiene una sola torre que se encuentra al lado derecho con ocho columnas salomónicas y motivos en argamasa en forma de ángeles, digna de admiración, sostiene el historiador Morales Suárez.
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Otra estructura que es digna de apreciar es la de la campana mayor, que pocas personas pueden ver de cerca pues el acceso es restringido solo a quienes ocupan los cargos eclesiásticos y además de mantener la firme creencia de que las mujeres no pueden hacer el repique.
La campana principal presenta una inscripción con fecha de su fundición el 4 de mayo de 1874. Mientras, la campana menor data de 1878, en tanto, la esquila que está al sur fue fundida en 1758 y tiene una inscripción que dice “Mi patria es el cielo”.
Anteriormente la parte posterior tenía una entrada en la que quedó grabada sobre cantera en español poco legible, posiblemente del siglo XVIII, una frase cuya transcripción sería “El que ha de subir a esta torre de la virgen santísima, ha de rezar un padre nuestro y un ave María para las ánimas del purgatorio”.
La belleza de este templo es innegable, en su interior existe una escalera de caracol construida en cantera que comunica al coro, donde se encuentra un órgano con fuelle manual de piel construido en la ciudad de Puebla en el siglo XVIII, específicamente en el año 1738.
El fiscal de la iglesia, Óscar Sarmiento Rojas, expresó que debido a la antigüedad que tiene este órgano es tocado solo por personas especializadas, pero se mantiene funcional cada misa dominical y esperan en 2024 se pueda sumar al Festival de Coros de Tlaxcala.
En la sacristía existe un tazón de pila de agua bendita, sin pedestal, labrado en cantera con altos relieves que asemejan plumas al estilo prehispánico y sobre las paredes se pueden apreciar pinturas al óleo sobre San Miguel Arcángel y la última cena.
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Otra de las particularidades a destacar es el atrio que está cubierto de grandes pinos, que parecen guardianes de las personas que han sido sepultadas en este espacio que también juega el papel de cementerio.
Los grandes árboles tienen edades de aproximadamente 250 o 300 años según los pobladores de la región, los más jóvenes entre 100 y 200 años.
LA CANDELARIA, TEOTLALPAN, LLENA DE TRADICIONES
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Las tradiciones principales es la de la fiesta patronal cada 2 de febrero de manera anual, otra festividad de importancia es la Semana Santa en la que se lleva cabo el Viacrucis que sale del templo y llega a la comunidad de Acxotla del Río.
El Santo Jubileo también es de relevancia, fiesta religiosa que llevan a cabo las socias del Santísimo Sacramento, del 3 al 12 de julio.
Durante la celebración de Todos Santos tiene lugar el evento cultural “Inmensidad” que tienen como finalidad que la gente sostenga una interacción con la naturaleza, a través de la emisión de diferentes sonidos de los que emiten los árboles.
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Además, la noche del 1 de noviembre y la madrugada del día 2 de noviembre, los habitantes de la comunidad velan a sus difuntos, iluminando sus tumbas con veladoras.
TIEMPO HA CAUSADO DESPERFECTOS
La tromba registrada el pasado mes de agosto provocó algunas afectaciones en la cúpula principal del templo, por lo que la fiscalía trabaja en algunos aspectos por reconstruir y restaurar, para lo que han requerido el apoyo del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
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Entre los desperfectos se encuentran algunas grietas en la cúpula del altar mayor que causa que el agua se filtre, además de la caída de algunos árboles que pasaron a afectar el campanario, la parte frontal de la iglesia.
- 1690 fecha aproximada en la que se empezó a trabajar en la edificación de la iglesia de La Candelaria.
- 1792 año en que el inmueble abrió sus puertas por primera ocasión en la comunidad de Teotlalpan.
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ARQUITECTURA
El templo está construido por piedra de jalnene, que fue pegada con mortero compuesto con cal y lodo. En algunas zonas fue construida por piedra de cantera.
Algunos archivos denotan que la construcción fue entre pobladores y franciscanos durante la evangelización.