A decir de Gisela Pérez Cordero, la vocación es simplemente indispensable en el trabajo de una maestra, por eso a pesar de contar con 34 años de servicio en la educación, ha retrasado su proceso de jubilación al considerar que todavía puede ayudar a formar a los estudiantes.
Hoy en día la docente imparte las asignaturas de Historia; Formación Cívica y Ética; Geografía y Tutoría, en el turno matutino y vespertino en la Secundaria Técnica 9, ubicada en el municipio de Apizaco.
Entrevistada por este Diario, durante el festejo que organizó el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Sección 31 y la Secretaría de Educación Pública del Estado, afirmó que cuando comprueba que un alumno aprende siente satisfacción por dejar un grano de arena en su formación académica y lograr trascender en su vida. “La educación es una profesión que requiere de una vocación muy importante porque vas a amar lo que haces. Ser maestra te llena el alma, te permite poder convivir con tus alumnos, disfrutar del trabajo, porque agrada y no sólo porque pagan”, consideró.
Tras calificar como noble la profesión de maestra, Gisela dijo que las mujeres son un elemento importante en el magisterio porque a lo largo del tiempo se han empoderado en el sector educativo.
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Me gusta mucho mi trabajo y mientras pueda lo voy a seguir haciendo, a pesar de que soy originaria de la Ciudad de México, quiero a Tlaxcala porque aquí me tocó venir a trabajar y aquí me quedé, resaltó.
Finalmente, consideró que el festejo de la madre trabajadora del sector educativo que organiza el SNTE les permite disfrutar de un rato agradable y convivir con sus compañeras.