“Si alguien del crimen se acerca a buscarnos como sacerdotes, tenemos que atenderlo; debemos buscar todos los caminos posibles para la paz”, manifestaron obispos, al cerrar filas en torno al obispo de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel, quien se reunió con un líder del crimen organizado en días pasados para que se comprometiera a no asesinar a más candidatos en Guerrero.
“Los obispos de México estamos con el señor Rangel, estamos con él en su trabajo, valiente, arriesgando su vida por el pueblo al encomendado”, externó Alfonso G. Miranda Guardiola, secretario de la Conferencia del Episcopado Mexicano.
A su vez, el arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, quien estuvo un tiempo en Guerrero, destacó que en su calidad de sacerdote tienen acercamiento con toda la población, incluyendo al crimen.
Miranda Guardiola elogió el trabajo valiente de Salvador Rangel, quien ha entablado el diálogo con miembros del crimen organizado para lograr la paz en Guerrero. En conferencia de prensa, en el marco de la 105 Asamblea Plenaria de la Conferencia del Episcopado Mexicano, el secretario de la CEM manifestó que el lunes el Consejo de Presidencia sostuvo una reunión cordial con el titular de la Segob.
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